Funcionario de OEA pidió en Salta la detección de lavado de dinero

El secretario ejecutivo de la Comisión Interamericana para el Control del Abuso de Drogas (Cicad) de la OEA, Paul Simons, aseguró que "es clave la detección de los flujos de dinero" para desarticular los grupos criminales vinculados al narcotráfico.

 

"Es muy importante detectar los flujos de dinero porque por medio de la plata se detectan los grupos criminales de los que no se conocen los orígenes", sentenció el principal funcionario de políticas sobre drogas de la Organización de los Estados Americanos (OEA).

Simons, quien estuvo en Salta esta semana participando en el Encuentro Internacional del Programa Alianza de Ciudades para la Prevención y el Tratamiento de las Drogas, dijo que Argentina interviene activamente en el debate regional sobre narcotráfico y que el tema del lavado de dinero "es clave en el hemisferio".

En diálogo con NA, el funcionario habló sobre las problemáticas regionales con las que se está trabajando y señaló que "el crimen organizado es mucho más que narcotráfico" y que desde la Cicad se enfocaron en el tema del lavado de dinero en diferentes países. Simons contó además que desde 2009, la Cicad comenzó a trabajar en el desarrollo institucional de la pesquisas sobre lavado de dinero y que desde entonces vienen recolectando información de los países miembros que integran la Comisión.

"El proceso es lento, pero hay que empezar a establecer el vínculo entre los países y generar cooperación internacional porque por lo general un caso se origina en un país y la denuncia se realiza en otro", señaló el embajador.

"El tema es muy clave en el hemisferio y requiere mucho trabajo e inversión", sentenció Simons quien dijo también que "queda mucho por hacer en el marco internacional con respecto al lavado de dinero porque los criminales conocen muy bien las leyes".

El embajador participó en varias mesas de debate en el Encuentro Internacional que se realizó en Salta los pasados lunes y martes, y se mostró sorprendido por la iniciativa que tuvo la provincia de Salta de crear Tribunales de Tratamiento de Drogas (TTD), que plantean una alternativa al encarcelamiento de las personas que delinquen bajo efectos de estupefacientes.

"Estamos trabajando en la recolección de información de lo que está pasando en los diferentes países, y estamos tratando de diferenciar entre microtraficantes y narcotraficantes".

La discusión en la que trabajan en la Cicad gira en torno a encontrar el sistema legal apropiado para tratar a los pequeños traficantes que tienen problemas de consumo y a los que consideran que no deberían encarcelar.

Es decir, que desde la Cicad, al igual que lo viene trabajando la provincia de Salta, buscan alternativas al encarcelamiento de las personas en conflicto con la ley y con las adicciones.

"Es una nueva área en la que trabajamos porque los países miembros están preocupados porque tienen mucha carga en el sistema penitenciario y están considerando que se hace para evitar la impunidad", indicó.

Al ser consultado sobre el tema del narcotráfico en Argentina, el embajador no quiso opinar del tema porque dijo que no tiene datos concretos.

Sin embargo, quiso hacer una aclaración con respecto al debate de la legalización de las drogas que se generó a partir de una declaración del sacerdote Juan Carlos Molina, a cargo de la Sedronar.

"Hay que aclarar que legalización no es lo mismo que despenalización porque se ha generado una confusión en los medios. Legalización significa crear un mercado regulado, es decir proveer una oferta legal y la despenalización del consumo fácilmente puede convivir con la oferta que viene por la criminalidad", explicó.

Simons que puso el ejemplo de Uruguay que tiene despenalizado el consumo desde hace muchos años y ahora legalizó la marihuana, confirmó que desde la Seacad siguen de cerca a Uruguay por la legalización y también al estado de Colorado para ver como lo implementan.

"Nosotros estamos siguiendo el tema aunque desde la OEA no tenemos una posición tomada a pesar que han surgido muchos argumentos a favor, pero también hay muchos argumentos en contra por el tema de la salud y del riesgo que los pibes comiencen a consumir desde mas jóvenes si la oferta es legal", explicó.

"En Uruguay -siguió el funcionario- lanzaron este proyecto específicamente para tratar de disminuir el crimen organizado porque creen que un mercado regulado va a bajar la delincuencia, pero eso también hay que medirlo científicamente".

Al concluir la charla, Simons remarcó que la región esta debatiendo el tema de la legalización, pero que los países miembros quieren esperar a ver que pasa realmente en Uruguay porque consideran que "es muy difícil construir un sistema que provea la sustancia ya que hay que tener muchos controles regulatorios complicados de construir".

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