El Frente Cívico y el PJ fueron los que más espacio perdieron. Las agrupaciones locales y el PRO los que más ganaron, seguidos por el Frente para la Victoria. Y la UCR quedó igual, como si nada hubiera pasado.

Ese podría ser el balance ­final sobre el reparto de poder en los 426 gobiernos de muni­cipios y comunas de Córdoba, una vez que el domingo pasado culminó el largo proceso de elecciones locales, que se inició en marzo y que desde entonces no tuvo casi domingo sin co­micios en esta provincia. De 427, sólo queda pendiente Río Cuarto, que elegirá intendente recién en 2016.

 

El peronismo de Unión por Córdoba es la fuerza que desde diciembre seguirá controlando más localidades, aunque en 2015 perdió espacio en relación con 2011. De 207 municipios y comunas que hoy gobierna, pasará a hacerlo en 190.

El otro que baja, y en pro­porción superior, es el juecista Frente Cívico, que de contar nueve intendentes propios ahora se quedará con cinco, pero 
en todos esos casos ya en alianzas compartidas con otros partidos.

La UCR ganó y perdió gobiernos locales pero al final se quedará en el nuevo período con el mismo número de administraciones que hoy tiene: 137.

Entre los que ganaron terreno, el Frente para la Victoria subió algunos escalones, porque puso en juego 38 municipios 
y comunas y desde diciembre ­controlará 43. Mayor es el crecimiento de las agrupaciones locales o partidos vecinalistas –si se los cuenta juntos– porque pasarán de 35 a 44 localidades. El salto mayor, en proporción, es del macrista PRO, que de no tener a ningún intendente propio en Córdoba pasará a contar con siete.

Este balance merece algunas advertencias: hubo alianzas cruzadas y cambiantes entre partidos, y en ese marco, localidades que se adjudican como ganadas más de una fuerza. El criterio de este diario fue, básicamente, establecer qué partido representaba quien encabezaba la lista en cada municipio o comuna. Pero además las pertenencias partidarias son relativizadas cada vez más por los propios dirigentes: algunos que ganan por un partido al poco tiempo admiten haberse corrido a otro, o autoridades que en 2011 fueron electos por una agrupación ahora resultaron reelegidos, pero por otra.

Los números finales terminan mostrando, de todos modos, un mapa de reparto de poder para los próximos cuatro años bastante similar al que culmina ahora, con variantes no muy significativas y el dato central de que siguen siendo Unión por Córdoba primero, y la UCR después, las fuerzas con más localidades a cargo.

Las 20 más grandes

Si la cuenta es con las 20 ciudades más grandes de Córdoba (que representan el 65 por ciento de la población total) se observan algunas variantes mayores. En ese lote, la UCR ganó terreno, a costa del PJ, que redujo su presencia.

De 19 ciudades (Río Cuarto aún no votó), el peronismo pasó de administrar nueve grandes a quedarse con sólo cuatro. Los radicales, en cambio, de cinco subieron a siete (y son gobierno además en Río Cuarto). También escaló el PRO, que de cero pasa a contar dos intendentes de su palo. En tanto, el Frente para 
la Victoria se quedó con las dos ciudades que ya con­trolaba y los agrupaciones locales pasan de tres a cuatro gobiernos.

En este lote de las 20 mayores, Unión por Córdoba retuvo San Francisco, La Calera y Alta Gracia, y recuperó Cruz del Eje. La UCR logró mantenerse en Capital, Río Tercero, Arroyito y Río Segundo y sumó este año a Bell Ville, Laboulaye y Río Ceballos. El kirchnerismo mantuvo Villa María y Villa Dolores, mientras que del PRO son los nuevos intendentes de Marcos Juárez y Villa Allende. Finalmente, fuerzas locales sin pertenencia a partidos nacionales ganaron en Carlos Paz, Cosquín, Deán Funes y en Jesús María (en este último caso junto al Frente Cívico y el PRO).

De todos modos, la diferencia de volumen electoral sobresale cuando se observa que sólo la Capital tiene más habitantes (1.300.000) que las 19 ciudades que le siguen (900 mil en la ­suma).

Si se cuenta lo que perdieron, y no lo que ganaron, este año 
el PJ cedió los gobiernos de Marcos Juárez, Villa Allende, Cosquín, Río Ceballos, Labou­laye y Bell Ville, mientras que los radicales cayeron en Cruz del Eje.

Las 48 ciudades

El panorama presenta otras variantes si el balance se hace sobre todas las ciudades cordobesas, es decir, las 48 localidades de más de 10 mil habitantes. En ese lote ya los cambios se hacen menos notorios, porque en la mayoría ganaron los oficialismos gobernantes.

Pero el balance muestra que, entre las 48 ciudades (contando a Río Cuarto como de la UCR aún), los radicales quedan primeros en la tabla con 18 intendentes propios, seguidos por los 16 del justicialismo.

Luego, lejos, aparecen los seis que pertenecen a fuerzas locales o vecinalistas, cuatro del Frente para la Victoria, 
dos del PRO y dos del Frente ­Cívico.

Nuevo mapa

UCR: Capital, Río Cuarto (vota en 2016), Río Tercero, Bell Ville, Río Segundo, Arroyito, Laboulaye, Río Ceballos, Morteros, Villa del Rosario, La Falda, General Cabrera, Malvinas, Monte Cristo, Vicuña Mackenna, Hernando, Mendiolaza y Capilla del Monte.

PJ: San Francisco, La Calera, Alta Gracia, Cruz del Eje, Saldán, Unquillo, Santa Rosa de Calamuchita, Oncativo, Brinkmann, La Carlota, Colonia Caroya, Malagueño, Corral de Bustos, Almafuerte y Las Varillas. 

FPV: Villa María, Villa Dolores, Leones y Villa Nueva.

PRO: Villa Allende y Marcos Juárez. Frente Cívico: Jesús María y Oliva. Partidos locales: Carlos Paz, Deán Funes, Cosquín, Pilar, General Deheza, Salsipuedes.