El Comunicado:

“Cristo vs. Refugio”: Prioridades del Ejecutivo local

La inauguración del Cristo en las Sierras, este domingo, trae aparejadas demasiadas contradicciones. Su emplazamiento el mismo día en que se reivindica el Respeto a la Diversidad Cultural expresa, sin disimulo, una decisión política que no repara en los valores de su comunidad.

La enumeración de críticas que ha recibido esta obra turístico-religiosa, desde el momento en que se conoció el proyecto, abarca exposiciones que incluyen sus aspectos artísticos, simbólicos, patrimoniales, ambientales e, incluso, legales. Sin embargo, ninguno de estos argumentos fue suficiente para modificar una decisión que tiende a convertirse en mero capricho.

Cuánto dinero costó y costará al Municipio de Tandil la instalación del “Cristo en las Sierras” y el mantenimiento de ese paseo resulta una incógnita. Partidas presupuestarias de diferentes áreas han sido afectadas. Terraplenes, senderos, forestación, iluminación, salarios municipales, horas extras, etc., etc.

Entre tanto, los habitantes de la ciudad seguimos padeciendo la falta de cobertura de numerosas demandas socialmente necesarias. Entre tanto, las mujeres de nuestra ciudad siguen viendo vulnerados sus derechos.

Desde 2011 los reclamos del Foro por la Promoción y Protección de los Derechos de las Mujeres han tenido como eje central la protección de mujeres en situaciones de violencia de distinto tipo. En abril de este año reiteramos al intendente Lunghi la necesidad de garantizar la asistencia integral, desde una perspectiva de género, para las mujeres víctimas de violencia sexista, incluyendo la asistencia psicológica sostenida en el tiempo, el acceso a la Justicia con patrocinios jurídicos gratuitos, la disposición de asignaciones económicas temporales y una adecuada y digna respuesta habitacional y alimentaria que requiere, indefectiblemente, la disponibilidad de un refugio al cual acudir durante las primeras 72 horas de producida la denuncia, tal como lo establece la Ley 26.485.

Con posterioridad a esa presentación, las imágenes de los lugares en los que el Municipio pretende dar respuestas habitacionales a las mujeres víctimas de violencia fueron difundidas en diferentes medios de comunicación. En ese momento quedó claro que esos lugares no garantizaban ningún tipo de derechos a las mujeres: respuestas habitacionales indignas, que refuerzan la situación de vulnerabilidad en la que estas mujeres –y sus hijos e hijas- se encuentran.

A partir de entonces, y tras las desafortunadas declaraciones del Intendente en las que se manifestaba contrario a emitir opiniones sobre el problema aduciendo que “el silencio es salud”, la presión social y política “obligó” al Ejecutivo a tomar cartas en el asunto garantizando que, prontamente, estaría habilitado un refugio para mujeres víctimas de violencia en el que se desempeñaría un equipo de asistencia integral. Sin embargo, este Foro pudo constatar que, aún hoy, las mujeres que requieren asistencia habitacional siguen siendo derivadas a los mismos lugares.

La decisión del emplazamiento del “Cristo en las Sierras” es una decisión política y como tal manifiesta una intencionalidad política. La intencionalidad política del emplazamiento del “Cristo en las Sierras” implica los intereses del Intendente comunal. La decisión política del emplazamiento del “Cristo en las Sierras” define las prioridades políticas del Ejecutivo municipal. Las prioridades políticas puestas de manifiesto en el emplazamiento del “Cristo en las Sierras” vulneran los derechos de la propia comunidad en la que se emplaza.

Mientras tanto, nosotras, las mujeres, ciudadanas de esta ciudad, seguimos formando parte, no de las prioridades sino de las postergaciones. Y mientras el “Cristo” resplandece en el cerro, el Refugio para mujeres víctimas de violencia “brilla” por su ausencia.