La fiscal pidió dos años de prisión para Jorge Matzkin

El ex ministro duhaldista, Jorge Rubén "Toto" Matzkin, podría ser condenado a dos años de prisión en suspenso por el delito de abuso de arma de fuego a raíz de la solicitud realizada por la fiscal María Cecilia Martiní, durante su alegado en la audiencia que se llevó adelante ayer en la Ciudad Judicial de Santa Rosa.
Por su lado, la defensa alegó que Matzkin actuó en legítima defensa y pidió la absolución. La sentencia se leerá el lunes próximo a las 12.

El ex funcionario está acusado por haberle disparado a Jonathan Paolo Pérez, cuando éste escapaba tras ingresar a robar en la casa de su hijo David Matzkin y sus dos nietos. Aquel 22 de agosto de 2011 a la madrugada, "Toto" Matzkin cruzó de su casa a la de su hijo ante el pedido de ayuda, con dos fajos de dinero y una pistola Glock calibre 40 entre su ropa. Al llegar a la vivienda, el joven -que tenía retenido a David con un cuchillo- salió corriendo y tomó un fajo de 10 mil dólares. En ese momento, el ex ministro le disparó mientras huía, acertándole uno de los cuatro tiros.

Ayer, la situación curiosa de la audiencia, prevista para los alegatos, se vivió a partir de la ausencia sorpresiva de Pérez, que así renunció a la querella. Desde la Alcaidía de Santa Rosa, donde se encuentra detenido cumpliendo su condena, notificaron a la jueza Laura Armagno que el joven "no quería ir". De esa forma, el abogado querellante Néstor Lambretch no pudo alegar, ya que no es "apoderado" de Pérez, sino simplemente patrocinante.

Dos años de prisión.

La fiscal Martiní consideró "acreditado" que Matzkin le disparó aquella madrugada de agosto de 2011 a Jonathan Paolo Pérez desde afuera de la vivienda de su hijo David y a unos 50 metros de distancia, cuando el joven escapaba por la calle Catriló hacia Utracán y "ya no representaba ningún riesgo para las personas ni los bienes".

En su argumento, además, la fiscal indicó que "no hay prueba que se corresponda con el relato de Matzkin", quien dijo que uno de los disparos ocurrió en el interior de la vivienda, cuando Pérez corría hacia él para luego escapar.

Relatando los hechos objetivos, Martiní aseguró a su vez que personal de la División Criminalística buscó en toda el área y encontró solamente cuatro vainas en un mismo lugar, donde Matzkin se había posicionado para ejecutar los disparos. En la primera audiencia, el joven Pérez dijo que el ex ministro le tiró a matar.

La fiscal, por otro lado, señaló que en la actitud de Matzkin al disparar contra Pérez "hubo intencionalidad porque fue a buscar el arma y después también persiguió al delincuente en su camioneta. Había una clara intención de utilizar el arma". Utilizando esos argumentos, Martiní solicitó dos años de prisión en suspenso.

Legítima defensa.

El abogado defensor, Carlos Amado, inició su exposición diciendo que Matzkin "se defendió así mismo y a su familia" y le pidió a la jueza Armagno que considere la reacción del ex ministro duhaldista en el marco de la violencia generada por el robo que sufrió su hijo, David. "Son situaciones continuas que se sucedieron y no hubo deliberación consciente para responder y reflexionar en el acto", agregó.

Amado intentó justificar la reacción de Matzkin. Y es más, en algunos momentos pareció sobrepasar una línea peligrosa al afirmar que fue "lo más lógico que (su defendido) agarre un arma, no se podía esperar una reacción lógica. El tomó un arma porque no tenía otra cosa a mano. En esos momentos no hay tiempo, ¿qué otra reacción se podía esperar?".

Siguiendo con su defensa, el abogado comentó que según la doctrina, las amenazas que Pérez realizó contra su hijo y sus nietas justificaron la reacción, y que hay tres causales de punibilidad: amenazas de muerte del asaltante, la defensa propia y la defensa de terceros. Agregó que al ser amenazado Matzkin se encontraba restringido en su actuación, por lo que pidió la absolución por considerar que se trató de una actuación de legítima defensa.

"Tranquilo con mi conciencia"

Jorge Rubén Matzkin, que después de su paso por los gobiernos menemista y duhaldista se convirtió en un gran empresario agropecuario, dio muestra ayer de no arrepentirse de lo ocurrido en aquel agosto de 2011 cuando le disparó a Jonathan Paolo Pérez. "Estoy tranquilo con mi conciencia por haber actuado con mis valores familiares", indicó el ex funcionario nacional, que hirió de bala al joven y que además cuestionó a la fiscalía por el manejo de las pericias, llegando a "una construcción que no se corresponde con la realidad".

"Estoy sorprendido"

El abogado querellante, Néstor Lambretch, se mostró "sorprendido" por la actitud de Jonathan Paolo Pérez, su patrocinado, que decidió no asistir ayer a la audiencia y renunció a la acusación que tenía prevista el letrado por tentativa de homicidio contra el ex ministro del Interior, Jorge Rubén Matzkin.

"Estoy sorprendido por lo que sucedió, sinceramente. Es una situación muy rara, pudo existir también algún tipo de presión pero realmente no lo sé", comentó Lambretch en diálogo con un cronista de LA ARENA, después de la audiencia de alegatos realizada ayer en la Ciudad Judicial.

Ante la ausencia de Pérez, que fue notificada a la juez Laura Armagno por las autoridades de la Alcaidía, donde el joven se encuentra cumpliendo una condena de 13 años por el robo a David Matzkin (hijo del ex ministro), el letrado -según explicó- no pudo alegar ya que es simplemente patrocinante y no apoderado del joven. Incluso comentó que los familiares no pudieron hacerle el poder por cuestiones económicas, ya que cuesta entre 600 y 700 pesos.

Por otro lado, Lambretch cuestionó también la acusación por abuso de arma que planteó ayer la fiscal María Cecilia Martiní contra Matzkin. La representante del Ministerio Público le solicitó a la jueza Armagno una pena de dos años de prisión en suspenso para el empresario imputado.

Precisamente, el letrado que representó a Pérez aseguró que "la acusación de la fiscalía no tiene mucho peso en cuanto a la cantidad de años de pena, y que a su vez hay una desproporción entre la calidad del abuso de arma y de la tentativa de homicidio que tenía prevista".

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