En diálogo con El Eco de Tandil, el funcionario local aclaró en primer lugar que los pliegos ya estaban todos armados, pero faltaba incluir la fuente de financiamiento, que apareció finalmente este viernes -en el Encuentro Nacional de Intendentes- con la firma del acuerdo entre el intendente Miguel Lunghi y la subsecretaria nacional de Hábitat y Desarrollo Humano, Marina Klemensiewicz.

Afirmó, entonces, que el Municipio ya está en condiciones de comenzar -a partir de mañana y durante dos semanas- con los procesos licitatorios, a la espera del primer desembolso de los fondos de la Nación.

Los primeros trabajos

Concretamente, Guadagna indicó que la inversión que demandará el proyecto será de “74.151.000 pesos”, de los cuales 71.880.000 serán destinados a obras físicas y los cerca de 2.500.000 restantes serán utilizados a los proyectos sociales previstos.

En torno al mecanismo que llevará adelante el Municipio, aclaró que “los procesos licitatorios se iniciarán en simultáneo” y la ejecución en obra será en función de las cuestiones técnicas, es decir, que se avanzará en principio con el desarrollo de toda la infraestructura de redes para luego sí continuar con “cordón cuneta, pavimento de cuadras que hacen de nexo entre donde se encuentran hoy la guardaría y donde se va a emplazar el jardín de infantes, y la construcción del edificio NIDO, que es el SUM donde se desarrollarán las actividades sociales”, enumeró.

“Esos trabajos –indicó el secretario- se van a ir iniciando paulatinamente a medida de que vayan desarrollándose las infraestructuras de redes”.

La mano de obra local

Por otro lado, se le consultó si se priorizará la mano de obra local en la ejecución de los trabajos y en ese sentido aclaró que si bien la ley de obras públicas nada dice de eso, el Municipio sí incluyó un texto en el que propende a ocupar mano de obra de Tandil y, en tanto sea posible, que sea del propio barrio, de manera tal de “generar pertenencia” entre la población y la propia obra.

Manifestó que ésa es la idea, aunque insistió en que luego estará atado, como la ley nada dice, “al modo y las estrategias de cada una de las empresas adjudicatarias de cada una de las licitaciones”.

“Pero –insistió- sí está ese texto en sentido de propender a que se convoque a mano de obra local, preferentemente del área de la obra”.

Los plazos

En cuanto a los plazos de inicio de los trabajos, Guadagna aseguró que los procesos licitatorios demandarán unos cuarenta días hasta la adjudicación de las obras a raíz de los tiempos legales que también forman parte del mecanismo.

“Entre el llamado, la presentación de ofertas, la apertura de los sobres, evaluación de las propuestas para su adjudicación y la documentación que deben presentar las empresas adjudicatarias -de acuerdo a los tiempos que venimos manejando con las obras que financia el Plan Provincial de Infraestructura-, serán cuarenta días, por lo que estaremos empezando con las obras cerca de mitad de noviembre”, calculó.

Recordó que la obra “prevé un plazo de 27 meses, a partir de la firma del convenio, en ese tiempo tiene que estar terminada y los proyectos sociales en ejecución”.

En ese marco, señaló que el Municipio tendrá a su cargo “la inspección y la calidad de las obras”, mientras que la Nación se encargará de “la auditoría sobre ejecución de obra, el pago de certificados y el cumplimiento de plazos”.

“La ciudad que debe ser”

Por último, el secretario de Planeamiento y Obras Públicas destacó que mediante la concreción del proyecto se dará “formalidad” a un sector de la ciudad que “hoy es definidamente informal”.

En definitiva, confirmó que se ejecutará “red de cloacas, agua, gas, algunas cuadras de pavimento, cordón cuneta, arenado de las calles, desagües pluviales, alumbrado público, energía eléctrica, las conexiones domiciliarias de cloacas, gas, electricidad, la señalización de las calles, refugios en las paradas de colectivos, el espacio NIDO, el playón deportivo, arbolado público, espacios verdes, veredas. Es decir, la ciudad que debe ser, de eso se trata”.

Otros proyectos

Reconoció que La Movediza “ha sido un barrio postergado” y aclaró que “no es el único”, por lo que confirmó que están trabajando desde el Municipio en proyectos similares, también buscando la fuente de financiamiento para “llevar estas mismas condiciones a otras áreas de la ciudad que están en la misma situación”.

Por último confirmó que los próximos barrios serían El Tropezón y Maggiori, pero advirtió que todavía se encuentran “perfeccionando” la limitación de las áreas de intervención junto a la Nación, que es la que evalúa el proyecto.