Este miércoles se aprobó, en la Cámara de Diputados de la Nación, el proyecto que modifica el Código Penal de la Nación, introduciendo la figura del arrepentido para casos de corrupción, que de esta forma se convirtió en ley.

Los diputados aceptaron los cambios introducidos por el Senado, para aclarar que el imputado sólo podrá facilitar a la Justicia datos vinculados a su causa, y hasta el momento de la elevación de la misma a juicio. Luego de ese plazo, el acusado no se podrá adherir a la nueva figura del arrepentido.

El proyecto que hoy fue aprobado de manera unánime por 137 votos a favor, ya había tenido media sanción de la Cámara Baja, casi por unanimidad en junio, pero en la discusión en el Senado se introdujeron modificaciones, que hoy fueron ratificadas.

También se estableció que el imputado sólo podrá facilitar a la Justicia datos vinculados a procesos penales de los que sea parte. Como beneficio por la colaboración, obtendrá reducciones en la pena con un máximo de 15 años. En ningún caso se podrá eximir de prisión.

Otro de los artículos que se agregó establece que el arrepentido puede acogerse al beneficio en un proceso penal del que sea parte y señalando a personas con su misma responsabilidad o mayor. Sólo podrá referirse a situaciones de las que estuvo involucrado y nunca a declaraciones de terceros.

Momentos antes de que el proyecto se convirtiera en ley, la diputada nacional por San Luis, Berta Arenas, le dijo en exclusiva a San Luis 24: “Nos habíamos quedado muy preocupados cómo había salido el proyecto de ley de Diputados, pero nosotros (por el bloque de Compromiso Federal), por el número de diputados que tenemos, no tuvimos peso en ese momento. Sin embargo, en el Senado han hecho algunos cambios que se acercarían al ideal de asegurar esa figura del arrepentido que tiene que brindarnos seguridad”.

A lo que agregó: “Se ha contemplado y delimitado el momento que la persona que se encuentra detenida puede practicar esa figura del arrepentido”.

Hasta ahora, la figura del arrepentido existía en la legislación únicamente para casos de narcotráfico, trata de personas, terrorismo, lavado de activo, y entre otros, pero no estaba contemplada para delitos contra la administración pública. A los casos de corrupción se le agregan contrabando, asociación ilícita, prostitución, pornografía infantil y formación de monopolios, entre otros.

La ley del arrepentido por corrupción fue una de las promesas de campaña de Mauricio Macri y uno de sus primeros anuncios como Presidente de la Nación. Pero la concreción llevó más tiempo del previsto. La iniciativa fue enviada al Congreso en los primeros meses del año y tuvo que esperar hasta hoy para su aprobación final.