NEUQUÉN (AN).- A una semana del inicio de la temporada de invierno, los equipos de medición del Observatorio Vulcanológico de los Andes del Sur de Chile (Ovdas) dieron cuenta que la etapa de actividad crítica del volcán Copahue "llegó a su fin".

Mientras se espera la inminente reducción del nivel de alerta que ayer se mantenía en naranja, el vulcanólogo del gobierno neuquino, Alberto Caselli, destacó con júbilo que "además observamos que comenzó a formarse nuevamente el lago en el cráter del volcán".

El especialista local destacó que "en Caviahue se nota que no hay actividad y tampoco se percibe el olor a azufre que hubo en los días de la evacuación". Y explicó que "en el ascenso al cráter que pudimos realizar vimos que está empezando a formarse nuevamente el lago, aunque esta vez en el extremo este".

El reporte del Ovdas del miércoles por la noche advirtió la finalización de la etapa de la actividad crítica y mientras indicó que se mantenía por precaución el nivel de alerta en naranja, dando un tiempo para confirmar la estabilización actual del sistema.

En Caviahue, el integrante del Concejo Municipal a cargo de la intendencia, Hugo Volpe, manifestó su alegría dado que indicó que "es lo que nos faltaba para poder tener una excelente temporada invernal" y detalló que "ahora esperamos la nieve que está pronosticada para este fin de semana".

La directora provincial de Defensa Civil, Vanina Merlo, advirtió que "más allá de que se baje el nivel de alerta vamos a seguir trabajando en la prevención, sobre todo para que los turistas estén tranquilos, porque como se vio con la evacuación, la gente de Caviahue está muy preparada".

En diálogo con "Río Negro" Caselli explicó que en pocos días comenzará la instalación de una estación sísmica de la Universidad de Río Negro en el lado argentino del volcán, que funcionaría como el puntapié para la creación de un observatorio vulcanológico en Caviahue. En tanto que detalló que "con aportes del Senado y del BPN se va a colocar un equipo de medición de gases para certificar la calidad del aire, que igualmente creemos que ha sido siempre buena".

Caselli destacó que "nos alegra a todos que el susto haya pasado", y advirtió que "ahora sólo resta hacer un seguimiento de la deformación que tuvo el volcán, que en los primeros días de esta crisis tuvo un incremento de 16 centímetros en su altura, y si todo está estable es posible que se baje el nivel de alerta".