Tal como informó la semana pasada Diario Patagónico, el juez Alejandro Soñis condenó a Franco Aguirre como autor penalmente responsable del delito de lesiones graves doblemente agravadas por el vínculo y por ensañamiento, las cuales tuvieron como víctima a su ex pareja.

Al fundar su fallo, el magistrado expresó que a través de la prueba que se produjo en el debate se resaltaron circunstancias que “dan cuenta del padecimiento extraordinario sufrido por la víctima y del obrar cruel de Aguirre al momento de la agresión”.

El juez afirmó en su análisis que tras agredirla fuertemente en la cabeza con un silla de madera y estando la víctima en el suelo, el imputado continuó con su agresión produciéndole varias lesiones punzocortantes en distintas partes de su cuerpo, para luego continuar su arremetida procediendo a ahorcarla hasta provocarle la pérdida de consciencia.

“El imputado no cesó en su accionar hasta que la víctima perdió la consciencia, lo que a mi juicio demuestra la finalidad que tuvo Aguirre de producirle un aumento deliberado de dolor y padecimiento”, describió el juez antes de declarar la responsabilidad penal por el delito antes anunciado.

Tal como fue informando Diario Patagónico durante cada avance de la causa, el juicio se inició el martes de la semana pasada con doce testimonios entre los que se destacaron el de la denunciante, la médica forense y el acusado. Allí, se expusieron los pormenores del ataque. Según la acusación, la víctima sufrió una escalada de agresiones físicas de parte de Aguirre y las agresiones culminaron con múltiples cortes en el rostro y el cuerpo de la mujer.

ALEGATOS

En los alegatos el fiscal general Juan Carlos Caperochipi solicitó que se declare penalmente responsable al imputado por los delitos de amenazas en concurso real con lesiones graves doblemente agravadas por el vínculo y por ser producidas con ensañamiento.

Su pedido se fundamentó en la prueba que se portó a lo largo del debate para establecer la responsabilidad del imputado. En razón de ello fue que calificó el accionar como de “gravísima violencia de género”. Actuó en “pleno ejercicio de sus facultades, con voluntad libre y plena conciencia de lo que estaba ejecutando”, detalló.

“La víctima le pedía que pare porque pensó que la iba a matar. ‘No te levantes porque si te levantas te mato’”, graficó el fiscal. Luego, mencionó la desfiguración permanente del rostro y las múltiples cicatrices que dejó en la víctima.

Respecto del ensañamiento, el acusador se refirió a la “crueldad con el dominio de la situación que siempre tuvo el victimario”. Por todo ello, negó la existencia de emoción violenta y de circunstancias extraordinarias de atenuación.

En contraposición, la defensora Viviana Barillari indicó que la Fiscalía no ha probado las amenazas ni el agravante del ensañamiento. Negó la existencia de las amenazas debido a que no hay denuncias. “No hubo ensañamiento ya que mi defendido actuó bajo un estado de profunda consternación”, aseguró.

Barillari postuló su estado de emoción violenta al momento del ataque y debido a ese shock emocional Aguirre sufrió una disminución de los frenos inhibitorios, planteó. La abogada pidió que no se responsabilice a su asistido por las amenazas ni por el ensañamiento debido a que actuó bajo un estado de emoción violenta.

Teniendo en cuenta ese panorama y ahora declarado responsable del delito, a las 10:30 se dará inicio al acto judicial en el que se establecerá la pena que deberá cumplir por pegarle a su ex pareja.