Federico Salvai es el jefe de Gabinete de la provincia de Buenos Aires. Nació en Salta hace 39 años. A los 18 se vino a la Capital para estudiar periodismo y Derecho. Es abogado y fue periodista. Tiene también un posgrado en la Escuela de Negocios de la Universidad Austral. De origen peronista, fue funcionario de la Provincia durante la gobernación de Duhalde.

En 2003 se sumó al Frente Compromiso por el Cambio, la agrupación creada por Mauricio Macri que tiempo después se convertiría en el PRO. Desde 2008 es la mano derecha de Maria Eugenia Vidal, que aquel año asumió como ministra de Desarrollo Social de Macri, en la Ciudad. En 2013 fue elegido legislador porteño. En 2015 fue jefe de campaña de Vidal en la Provincia. La gobernadora lo nombró ministro de Gobierno primero y jefe de Gabinete después.

-¿Qué hay detrás del larguísimo paro docente en la provincia de Buenos Aires? ¿Hay un reclamo legítimo; hay un interés político de los sindicatos o del gobierno de la Provincia por mantener el conflicto; o hay alguna intención destituyente como se ha escuchado por ahí?

-Hay política. Ya me parece que a esta altura no estamos en condiciones de decir que algunos de los gremios del frente gremial docente estén defendiendo los derechos de los trabajadores. Creo que acá estamos lastimando muchísimo a las familias y a los chicos de la provincia de Buenos Aires, tenemos que pensar en ellos y no tenemos que pensar en un año electoral. Nos pusimos de acuerdo el año pasado, en un año no electoral, y de pronto hace pocos días volvieron a faltar a una conciliación obligatoria. Volvieron a mostrar que no hay vocación de solucionar el conflicto. Al contrario, creo que este conflicto a algunos les da rédito y por eso te digo que estamos hablando más de política que de buscar una solución real, que es lo que queremos. Nosotros queremos que los chicos comiencen ya las clases.

-¿Usted piensa, como ha dicho del presidente Macri para abajo, que hay sectores políticos, eventualmente sindicales, trabajando para que el gobierno de Macri y de Vidal se caiga antes de tiempo?

-Llama la atención que en pocos días hayamos tenido una movilización docente; una movilización de la CGT; que tengamos ya paros docentes, que nosotros consideramos sin ningún justificativo, programados hasta fin de mes. Yo creo que hay una clara intencionalidad política y de que la imagen de la gobernadora y la imagen del presidente sea afectada por esto.

-Ustedes están gobernanado desde hace 15 meses la provincia de Buenos Aires, que tiene carencias de todo tipo; tiene enormes contraste sociales, económicos, políticos, culturales; tiene una inseguridad pavorosa y un Estado que es muy grande y al mismo tiempo es muy débil. Así viene el estado de la provincia de Buenos Aires desde hace mucho tiempo. Visto así, ¿la provincia es inviable, o es ingobernable?

-Es viable y es gobernable siempre y cuando hagamos las cosas bien. En la gestión anterior no quisieron dar la pelea dentro de la policía, y crearon las policías locales. No quisieron dar la pelea dentro del sistema de salud, y crearon las UPA. Si el estilo es el del anterior, la Provincia va a ser inviable y va a ser ingobernable. Si queremos dar las peleas en serio, que está dando esta gobernadora y todo el equipo, a largo plazo seguramente vamos a tener una provincia mucho mejor.

-Empezó el año electoral, de hecho, por distintas razones. Porque se habla de candidaturas, porque está en la disputa social, y el gobierno está atravesando dificultades que son propias de un año electoral. Visto desde ahí, ¿a ustedes quién les conviene como adversario en la provincia, Cristina o Randazzo? ¿Massa o Margarita Stolbizer? Y otra pregunta, ¿no tienen miedo de salir terceros en la elección y que todo se derrumbe?

-Nosotros tenemos que seguir en esta línea y hacer las cosas bien. Depende de nosotros el resultado de la elección. Yo siempre les digo a los ministros y en las reuniones partidarias, políticas, “esta elección la ganamos o la perdemos nosotros”. Yo creo que Cristina es parte del pasado y estoy seguro que mucha de la gente que ha apostado a Cambiemos nos va a seguir acompañando y una vez que sos parte del pasado, por lo menos la historia no ha demostrado que se pueda volver.

-A esta altura, decíamos 15 meses de gestión, ¿usted esperaba que las cosas en la provincia estuviesen mejor de lo que están? ¿O se encontraron con problemas más grandes de los que esperaban y algunas, o muchas, de las medidas que aplicaron no tuvieron el resultado que esperaban?

-Nosotros sabíamos a qué nos enfrentábamos. Sabíamos que era una provincia que venía de un desmanejo de muchos años, una provincia fundida. Pero también estamos orgullosos de lo que hicimos hasta ahora. Tenemos ya proyectadas más de mil obras, más de 500 se empezaron el año pasado. Creo que la obra pública es parte de una inclusión real que necesita la provincia y que necesita cada uno de los bonaerenses. Con lo cual si tenemos que destacar algo del año pasado es haber podido iniciar las clases en tiempo y forma, demostrar que se puede empezar la obra pública y que no hubo demoras. Y hoy lo que tenemos es la posibilidad de que haya más obra pública para mostrar y hacer una inclusión real, que es lo que le decía recién.