El contador público Ricardo Lizarraga, de 62 años, fue asesinado de un disparo esta madrugada, cuando intentó recuperar la moto de su hijo, sustraída por desconocidos. 

Familiares y amigos lo despidieron este viernes en Sasfer. Carlos Braga, explicó a Elonce TV que “es algo fuerte porque fue un amigo. Las circunstancias nos llevan a meditar desde diferentes puntos de vista y lo que a mi me pega es la vida y la forma, la pérdida, la manera en que se fue. Compartíamos las cosas que deberían estar ajenas a todo esto: deportes y más, pero la situación se nos da de esta manera”. 

Respecto a la vida de Lizarraga, aseguró que “era un tipo de muchos principios, que no tuvo conciencia de lo que hizo por defenderlos, fue alguien muy querido. Él era muy aferrado a los principios de la vida. En nuestro grupo de amigos estaba contenido y la última vez que nos vimos fue en el club. La vida tiene estas cosas”. 

“Tengo tristeza y rebelión, porque también estoy enojado con la sociedad que no reacciona, no puede ser lo que estamos viviendo, nos estamos acostumbrando a todo este tipo de cosas. Nadie merece la muerte violenta, hoy por hoy lo acompañamos a Ricardo y estará siempre entre nosotros”, lamentó y manifestó que “es la fatalidad de las cosas, los delincuentes habían abandonado la moto y él no la vio, son una serie de circunstancias que evidentemente determinaban que ese era el hecho y así tenía que terminar”.