La familia de Agustín cree que la escuela podría haber hecho más

La familia de Agustín cree que la escuela podría haber hecho más

El caso del chico asesinado por su padrastro en Flores. El tío dijo que tendrían que haber escuchado al padre biológico. Igual, pide que las docentes sean reincorporadas.

“La directora se tendría que haber puesto las pilas y averiguar”. La que habla es una tía de Agustín, quebrada, desde su casa de la zona del Abasto. Avanza y retrocede. Dice que entiende que una docente que tiene 30 alumnos a cargo pudo no haberse dado cuenta de que algo raro había en el caso de su sobrino. Pero que la directora tendría que haber sospechado si ya había tres actas labradas en tan poco tiempo. Su marido, hermano del padre biológico de Agustín, opina que desde la escuela podrían haber hecho algo más, como llamar a su hermano para indagar en el caso. Igual, ambos insisten en que la principal responsable es la mamá del chico. “Mámá se hizo la boluda. No nos cuidó”, cuentan que les dijo hace unos días la hermana de 7 años del chico asesinado.

La terrible muerte de Agustín Marrero, que tiene a su padrastro como principal acusado y procesado, intentó ser explicada hasta ahora tanto desde la familia de la madre como desde el jardín de Flores al que concurría. La mamá del chico ya fue procesada por no haber cuidado al nene de 5 años. Mientras que en la escuela dos docentes fueron separadas preventivamente de sus cargos mientras se investiga por qué el caso no fue denunciado. La familia del padre se había mantenido prácticamente al margen. La mayoría vive en Gesell. Pero ahora quisieron salir a impulsar la investigación. El tío paterno de Agustín, Julio César Marrero, dialogó con Clarín sobre los acontecimientos de los últimos días.

-Hubo una gran polémica sobre la forma en que se manejó la escuela con su sobrino. ¿Qué sensación le quedó?

-Creo que tendrían que haber llamado al padre biológico para escuchar su versión de lo que estaba pasando. También es cierto que el padre se mantuvo lejos y tiene algo de responsabilidad.

-¿Le parece bien que hayan separado del cargo a las docentes?

-Yo creo que las podrían haber dejado en el cargo y esperar a que se investigara.

-¿El argumento del gobierno de la Ciudad es que si siguen en la escuela podrían entorpecer la investigación?

-¿Pero en qué pueden perjudicarla si ya entregaron todo lo que tenían que entregar a la fiscalía? El único aspecto positivo de que las hayan separado del jardín es que se volvió a hablar de Agustín, para que tomara impulso la investigación, con el procesamiento del padrastro y de la madre.

-A pesar del dolor, apoya el reclamo de las docentes.

-Creo que no hay que provocar más dolor, incluso a esos chicos que ya perdieron a un compañerito y ahora pierden a su maestra. Por eso con mi mujer participamos de la marcha del miércoles. Me hubiera gustado que leyeran una carta en la que yo hablaba de la madre de Agustín (ver La carta), pero no quisieron. Después entendí que se trataba de un acto político.

-¿Qué decía la carta?

-Hablaba de quién es realmente esta persona. Entre los docentes me parece que existía la sensación de que era una víctima más de la violencia de género. Tal vez porque todavía no se había conocido su procesamiento por no haber evitado la muerte de su hijo.

-¿Ustedes tenían alguna certeza de que Agustín era golpeado por el padrastro?

-Había una sospecha porque su hermana una vez nos relató un episodio, y la madre lo minimizó. Le pregunté yo mismo a la madre y me mintió en la cara.

-Como a los docentes.

-Sí. Fue una situación complicada, porque todo pasó en poco tiempo. Agustín fue sólo 28 días al jardín. 

-Qué esperan ahora.

-Que vayan los dos presos. Y que la madre sea procesada por abandono de persona, no por omisión de cuidado como figura en la causa.

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