Exigirían por ley medidas para ahorrar agua en viviendas y lugares públicos

Un proyecto que ingresó esta semana en la Cámara de Diputados y que tiene como autor a Omar Soches López en conjunto con otros 6 legisladores justicialistas, pide que se instaure en carácter de obligatorio una serie de medidas para ahorrar y reutilizar agua tanto en nuevas construcciones particulares o lugares públicos.

De esta manera se exigirá que la grifería en todas las nuevas construcciones tanto públicas como privadas, tengan dispositivos que permitan la optimización del líquido.

Uno de estos elementos sería el grifo con temporizador que se instalarían en lugares que tengan acceso al público, sitios en donde la gente puede dejar la canilla abierta.

Estos dispositivos tiene un costo en negocios de Salta que van desde los $250 los m{as baratos.

A nivel doméstico, una alternativa para lavatorios y duchas es el grifo monocomando, ya que evita dejar abierta el agua para no tener que regular nuevamente el mezclado entre agua fría y caliente, sobre todo en la ducha y cuyo costo es de alrededor de $ 200.

En todos los casos se exigiría el uso de perlizadores para agua, que es un elemento sencillo colocado en la punta del grifo, que permite el ahorro de hasta el 50% del consumo de agua y que tiene un valor que oscila entre los $ 43 y los 150.

Aguas grises

Otra medida a exigirse será la implementación de sistemas de reutilización de aguas grises, que son aquellos que permitan la acumulación, tratamiento y posterior uso de aguas que por su carga orgánica y bacteriológica puedan ser tratadas a nivel doméstico y usadas como agua no potable, por ejemplo el agua del inodoro o la de las bachas de a cocina.

También se evalúa la captación doméstica de agua de lluvia, que es la instalación de un estanque que deberá estar cerrado, de forma tal que no pueda servir para la cría de mosquitos vectores del dengue u otras enfermedades y que permitirá que se capten precipitaciones para su posterior uso.

Los sistemas de reutilización de aguas grises y los de captación doméstica de agua de lluvia tendrán carácter obligatorio para las construcciones públicas, mientras que las privadas contarán con una desgravación impositiva de hasta un ciento por ciento sobre el impuesto inmobiliario provincial que grave al inmueble durante el término de un año.

Esta medida sería debido al alto costo que tienen las plantas depuradoras de aguas residuales domésticas, estimada en $ 9.415, para una vivienda con cinco habitantes.

En los establecimientos públicos y/o privados de pública concurrencia, construidos con anterioridad a la aprobación de la ley, deberán proceder progresivamente a la adopción de las medidas establecidas, en un plazo máximo de doce meses a partir de su reglamentación.

De no cumplir con lo solicitado tendrán sanciones que van de apercibimientos y multas hasta clausura temporal o definitiva del local.

Todo lo recaudado en concepto de multas serán destinados para educar en las escuelas de nivel inicial, primario y medio sobre el cuidado del agua, y para fomentar investigaciones sobre nuevos productos y procesos relacionados al ahorro de agua que realicen las universidades o centros de investigación ubicados en la Provincia de Salta.

Son coautores de esta iniciativa los diputados del PJ, Oscar R. Díaz, Francisca de Jesús Jiménez, Lucas Javier Godoy, Héctor Miguel Calabró, Eduardo Abel Ramos y Fernando Roberto Fabián.

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