Estados Unidos: los republicanos llegan a los comicios legislativos con una clara ventaja

Estados Unidos: los republicanos llegan a los comicios legislativos con una clara ventaja

Según un sondeo, se hallan con una ventaja ante los demócratas del presidente Barack Obama, gracias al descontento general con el mandatario y con la economía y las dudas sobre la capacidad del gobierno para afrontar grandes problemas.

Los norteamericanos irán a las urnas el martes 4 para renovar toda la Cámara de Representantes -donde tienen mayoría los republicanos- y un tercio del Senado -dominado por el oficialismo- y elegir a los gobernadores de 36 de los 50 estados, en la que serán las últimas elecciones de Obama como presidente.

La gran incógnita es el resultado de los comicios para el Senado, ya que las encuestas indican que no hay ninguna chance de que los republicanos pierdan la cámara baja y, en cambio, sí existe una posibilidad concreta de que puedan arrebatar la alta a los demócratas, bloqueando definitivamente la agenda de Obama.

Sin embargo, el entusiasmo del electorado por participar de estas elecciones -en Estados Unidos votar es optativo- parece ser inversamente proporcional a la trascendencia de los comicios, en la que los partidos invirtieron una cantidad récord de dinero en avisos publicitarios que atestan la programación de radio y TV.

De acuerdo a un sondeo difundido hoy conjuntamente por el diario The Washington Post y la cadena ABC, el interés del electorado está sensiblemente por debajo de las dos últimas elecciones de mitad de mandato, las de 2010 y 2006.

Dos de cada tres personas consultadas dijeron estar siguiendo con atención las elecciones de este año, comparado con tres de cada cuatro que afirmaron lo mismo en 2010 y en 2006.

Además, el 22% de los votantes encuestados contaron haber sido contactados por alguna de las agrupaciones políticas demócratas y republicanas que se encargan de persuadir a la gente para que ejerza su derecho al sufragio, 12 puntos menos que en los comicios de hace cuatro años.

Según The Washington Post y ABC, estos datos, sumados a la baja aprobación de la gestión de Obama, parecen destinados a desalentar el voto de los demócratas, siendo otro factor favorable a los republicanos, cuyos afiliados, históricamente, votan en mayor número que los afiliados demócratas.

En efecto, el sondeo, elaborado por la consultora Langer Research Associates, mostró que más afiliados republicanos que demócratas dijeron estar seguros de que irán a votar.

Asimismo, entre las personas que están siguiendo con atención las elecciones de este año son más las que en últimas presidenciales de 2012 votaron por el republicano Mitt Romney que las que lo hicieron por Obama, quien fue reelecto en esos comicios.

El descontento con el gobierno es más que palpable en el sondeo.

Pese a recientes mejoras en los índices macro y micreconómicos, siete de cada 10 consultados dicen que la economía no marcha bien y apenas el 28% dice que está despegando.

El malestar no da respiro tampoco en términos políticos.

Seis de cada 10 votantes manifestaron que tienen poca o ninguna confianza en que el gobierno federal esté haciendo lo correcto.

En momentos en que Estados Unidos enfrenta la amenaza del virus del Ebola y del grupo islamista Estado Islámico, un 53% piensa que la capacidad de la administración Obama para lidiar con los grandes problemas ha disminuido en los últimos años.

En cuanto al presidente, la aprobación de su gestión subió a 43%, aunque el margen de error hace que sea virtualmente la misma que el 40% que midió hace dos semanas, que fue su peor registro en esta categoría desde que llegó al poder, en 2009.

El mandatario hizo campaña a favor de candidatos a gobernador, pero evitó aparecer en estados que podría definir la composición del Senado. En esos estados, los candidatos han tratado de distanciarse del presidente, pese a que muchos de ellos han votado con gran disciplina todas las medidas impulsadas por la Casa Blanca.

Los republicanos necesitan una ganancia neta de seis bancas para pasar a tener mayoría en el Senado.

En este momento, según volvió a mostrar el sondeo, los republicanos tienen grandes probabilidades de ganar tres de esas seis bancas y aun posibilidades de obtener hasta siete asientos ahora controlados por senadores demócratas por Alaska, Arkansas, Colorado, Iowa, Louisiana, New Hampshire y Carolina del Norte.

Pero, por el contrario, también podrían perder tres bancas propias, en Georgia, Kansas y posiblemente Kentucky.

La encuesta mostró que más estadounidenses -46 contra 33%- esperan que los republicanos ganen el Senado, y más consultados -32% contra 24%- considera positivo más bien que negativo este cambio de mano de la cámara alta.

La encuesta fue realizada telefónicamente entre el jueves y el domingo pasado entre una muestra nacional de 1.204 adultos. El margen de error general es de 3%. 

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