BALCARCE: La gestión de Cambiemos se propuso desde el comienzo ordenar las finanzas municipales atendiendo el alto rojo de sus números. En ese marco, el principal acreedor es la empresa prestadora del servicio de recolección de residuos e higiene urbana.

Es por eso que se decidió encuadrar el servicio en lo que se pueda pagar y a partir de allí armar un pliego de bases y condiciones acorde a las necesidades ambientales y a la posibilidad económica.

El secretario de Planeamiento, Obras y Servicios Públicos, Carlos Katz, indicó que surgió la licitación del servicio con la idea de normalizarlo porque se venía trabajando con la emergencia económica y prórrogas de un viejo contrato.

“Aparecen dos cuestiones como marco general que establecen la estrategia. El actual contrato de higiene urbana excede las posibilidades económicas del municipio. Se trata de una restricción porque recaudamos por la tasa de recolección y mantenimiento de la vía pública menos de lo que sale pagar el contrato con la empresa que hoy lo brinda”, reflexionó el funcionario.

Sin embargo, también tuvieron que tener en cuenta que existe una especia de “tensión” porque la ciudad creció y se fue extendiendo a zonas donde hoy la recolección no llega.

“Hay una realidad económica financiera del municipio que pide enmarcar la situación real del servicio que hay que sumarle un pedido para extenderlo”, advirtió.

Katz hizo oportuno recordar que “cuando asumimos la gestión se le debían 17 millones de pesos al concesionario y que en los últimos meses de 2015 no se había pagado prácticamente nada”.

En tanto, también consideró que existe una “contradicción” en el servicio donde algunos vecinos tienen la recolección que pasa casi todos los días por su casa y otros que no tienen nada. “Armamos un pliego que nos permita explorar combinaciones posibles donde podamos darle el servicio a más vecinos pero pagar algo lógico, o sea al alcance del municipio”, entendió.