Se acerca esta fecha y la sensación es de vacío, de impotencia y de que no hay esfuerzo que valga. Hoy se conmemora el Día Internacional de las Víctimas de Accidentes de Tránsito, pero no llega -ni siquiera- con un poco de esperanza. Así lo aseguraron las impulsoras en Tucumán de la campaña de concientización vial “Estrellas Amarillas”: Elina yFlorencia Marchese, Marcela Reales, Graciela Alderetes y Clara Pucheta. 

“Nos servimos de los recuerdos de nuestros seres queridos para seguir adelante y trabajamos para que, a partir de nuestras dolorosas experiencias, estos hechos inútiles y sin sentido dejen de ser una de las principales causas de muerte en nuestro país. Pero sentimos que, a pesar de todo el esfuerzo y la entrega, nada cambia”, sostuvieron.

Les indigna, principalmente, que no se tome conciencia al volante y cada día sigan existiendo siniestros en calles y rutas tucumanas. Pero también les enoja que las penas para estos hechos sean débiles. Es que, de acuerdo con nuestro Código Penal, la mayoría de los accidentes de tránsito son considerados homicidios culposos. Es decir, que el responsable del hecho no tuvo intenciones de matar. Y suelen resolverse mediante una probation o suspensión de juicio a prueba: se deja sin efecto el cumplimiento de la condena a cambio de que el acusado cumpla una tarea comunitaria en las condiciones que se le impongan. 

“Ya vamos pintando más de 300 estrellas y la mayoría de los casos terminan en nada, cuanto mucho llegan a una probation. Es un insulto a las víctimas”, se quejó Elina, quien perdió a su mamá y a su hermano. También se pronunció en ese sentido Graciela, mamá de una adolescente que murió atropellada por un colectivo. “Lo que más le enoja a la gente es que la persona que mató a un ser querido continúa manejando como si nada hubiera pasado. Son necesarias penas que ejemplifiquen, aunque no sea con más de un mes en la cárcel, porque de esa manera se está indicando lo que se puede hacer y lo que no”, agregó.

“A nadie le importa”

El hermano de Clara fue atropellado y abandonado. Cuatro años después, la mujer afirmó: “al que maneja sin ningún tipo de respeto por las normas de tránsito se lo tiene que considerar un criminal”.

Marcela, por su parte, recordó que la muerte de su hermana se resolvió con una probation. “Se hizo una propuesta de $ 500 como aporte a una institución. A mí no me interesa ni el monto ni lo que haga, pero no estoy de acuerdo con la probation, no estoy de acuerdo con que alguien mate a una persona y no vaya a un juicio para que se determine cuál ha sido su responsabilidad. No le sirve a la familia de la víctima y tampoco le sirve a la sociedad”, reclamó. “Hay una sensación de impotencia, de desgano, de que a nadie le importa lo que te pasó”, insistió.

La Justicia, encargada de sancionar, y el Estado, que debe controlar y educar, son los principales responsables de estos hechos, según consideraron las mujeres.

“Cuando uno va a tribunales, la respuesta es: ‘pobre, no debe haber querido hacer daño, cómo le vamos a arruinar la vida a este adolescente con un proceso judicial’. En la mayoría de las causas no se hace nada y, cuando se hace algo, nadie lo controla”, disparó Florencia. “Nosotras tuvimos la posibilidad de poner un abogado pero hay gente que no. ¿Sabés qué les hacen? Los arreglan pagándoles el sepelio y el cajón, por ahí les dan $ 5.000 o las chapas para arreglar el techo, y después les hacen firmar un papel donde dice que no les van a iniciar una acción penal”, aseguró la mujer.

Florencia contó que las familias de las víctimas se emocionan cada vez que van a pintar las estrellas. “Cuando nos ven, los familiares tienen la sensación de que a alguien le importó lo que les pasó. Porque no les importó a los funcionarios, a la ambulancia que llegó tarde, al abogado que los estafó, al Estado, ni a la Justicia… la sensación que tienen es de que la muerte no le importó a nadie más que a ellos”, remarcó.

Inconsciencia

“A lo único que apuntamos es a salvar vidas”, afirmó Benjamín Nieva, secretario de Transporte de la provincia. El funcionario señaló que, con ese fin, realizan campañas de control, prevención y concientización en todo Tucumán. “También tuve el agrado de trabajar con varias asociaciones civiles de familiares de víctimas y es un honor, porque esta gente supo canalizar el dolor de la pérdida de un familiar y convertirlo en amor al prójimo”, añadió Nieva.

Según estimó el funcionario, este año se reducirán las víctimas de accidentes en Tucumán con relación al año pasado. No obstante, resaltó que más del 85% de los siniestros viales se producen por una falla humana. “Un error de cálculo, alguien que ha consumido alcohol o no ha dormido lo suficiente, una mala maniobra o una distracción con el celular”, explicó.

El crecimiento del parque automotor significa otra preocupación para el área que conduce Nieva y, dentro del mismo, la inmensa cantidad de motos que circulan por la provincia. “No hay cifras oficiales todavía, pero hablaríamos de dos motos por cada auto”, alertó. Asimismo, destacó que las posibilidades de sufrir secuelas graves son 70% mayores si se viaja en moto que en auto. “La franja etaria de 17 a 34 años es la que más sufre accidentes en motos; si no mueren quedan con algún tipo de lesión”, alertó Nieva. En ese sentido, afirmó que los motociclistas no suelen colaborar con la prevención. “Cada 10 motociclistas, ocho van sin casco y tres lo llevan en el codo”, precisó. “Llamo a la reflexión a los ciudadanos y a los municipios, les pido a los intendentes que tomen mano dura en los controles de tránsito”, solicitó el funcionario.

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