Según la escritura Nº 147 otorgada en Posadas a la empresa Carlos E. Enríquez Sociedad Anónima, en su artículo 3º del estatuto social, quedó acentuado que el capital social actual de la compañía aliada del gobierno de Maurice Closs, aumento a 40 millones de pesos. Esta empresa “mimada” por el gobernador misionero, está a cargo de Roberto Gabriel Enríquez (presidente), Rodolfo Carlos Enríquez (vicepresidente) y como director general Carlos Quiroga.

Esta empresa multifacética presidida, como lo manifiesta su estatuto, por Roberto Enríquez, se dedica al turismo y la obra pública. A través de una UTE, tiene la concesión del Parque Nacional Cataratas del Iguazú. El 21% de esa UTE pertenece a Petrovalle SA, de familiares del gobernador Maurice Closs, quien antes de asumir como primer mandatario también era accionista. Pero los beneficios de la empresa de Enríquez también llegan a la obra pública. En agosto de 2012, solo para citar un ejemplo, le adjudicaron la autovía Posadas- San José, por $120 millones.

Sin dudas el modelo de Lázaro Báez en Santa Cruz no es un caso aislado. El crecimiento económico exponencial de Carlos Enríquez, amigo del gobernador Maurice Closs desnudó  que la obra pública siempre queda en las mismas manos en Misiones.

Asimismo, la mayoría de las obras de la construcción en la provincia realizadas por esta compañía, están sospechadas por supuestos sobreprecios que esconderían una trama corrupta. Este mecanismo, un gobernador que privilegia a un empresario en particular, por supuesto recibe en consecuencia: las críticas de la oposición, las sospechas de la opinión pública y las suspicacias poseen cimientos fuertes.