Empate para festejar

Empate para festejar
Los Pumas lograron un histórico 16-16 ante los Springboks y demostraron que no están de relleno en el Rugby Championship. Argentina se plantó en Mendoza y casi lo gana. Para que tengan en cuenta los All Blacks y Wallabies.
Los Pumas y los Springboks llegaron a Mendoza con 14 choques en el historial, con absolutamente todos a favor de los sudafricanos, como el del sábado pasado en Ciudad del Cabo en el arranque del Rugby Championship. Pero todas las rachas se rompen y Mendoza fue el lugar, con 40 mil personas en el Malvinas Argentinas. La Selección dominó a Sudáfrica sobre todo en el primer tiempo, apoyó un try y estuvo arriba casi todo el partido. Casi lo gana, sí. Pero esto recién empieza…

Los Pumas tuvieron un primer tiempo para poner en un marquito. Merecedor de la ovación que se llevaron al descanso. Fue una actuación sólida, con rigor y dinámica. Los 20 minutos iniciales manejaron la pelota (70% de posesión) y hasta lograron que Sudáfrica se enojara. Los Springboks cometieron cinco penales en ese lapso, incómodos sin la pelota. Un penal de Rodríguez fue la única diferencia en el score. Tincho había fallado uno de 48 metros antes. El moño de ese lapso de dominio absoluto de Los Pumas fue una jugada en la que el equipo pasó de extrema defensa a extremo ataque y marcó el único try del PT. Remontó la cancha con el pack, penetrando firme y con buen ritmo. Hubo una linda corrida de Guiñazú para meterse en 22, otra entrada punzante de Farías y, con la defensa visitante desarmada, Fernández encontró el hueco para apoyar solito.

Cuando los Springboks fueron equiparando la posesión, la defensa Puma fue tremenda. Dobles tackles al por mayor que hasta les costaron golpazos en la cabeza a Galindo (tuvo que salir) y Farías. Nicolás Sánchez, reemplazante de Hernández, dejó el cuerpo y estuvo a la altura de las necesidades. Y se trenzó con Habana. Mucho potrero mostró el tucumano. Una pantalla de Vergallo le dio a Morne Steyn la chance de abrir el marcador para Sudáfrica. Antes, él había fallado uno (5 de 5 en Ciudad del Cabo) y Francois Steyn, otro. Un line preciso y un maul enjundioso, como aquellos del debut, forzaron otro penal a favor y los aplausos del capitán Fernández Lobbe. Rodríguez (3 de 5) la mandó adentro y el 13-3 parcial coronó el mejor primer tiempo argentino en mucho tiempo.

Sudáfrica necesitado es un problema mayor aún. Y salió más enojado al segundo tiempo. Manejó la pelota y los tiempos. Encontró posesiones más clara para darle ritmo y el capitán De Villiers comenzó a lastimar por el canal abierto. Los Pumas seguían firmísimos en defensa y, a diferencia del debut, se las arreglaban para generar algunas cositas que mantuviera preocupados a los Springboks. Como esa escapada de Landajo pegadito a una formación o ese line-maul que levantó el “uuuuuuuu” de la tribuna. Ese lapso de visita al campo de enfrente, ganando 16-9 (un penal de Rodríguez y dos de Morné Steyn) terminó con un intento de drop fallido de Fernández. Una pena.

A los dos minutos, Chelo Bosch recibió y quiso despejar hacia el abierto con el pie. Demoró un segundo más, Francois Steyn lo tapó y le quedó servida para el try. Un error y a pagar con un 16-16 tras la conversión de Morné Steyn. Los Pumas no se cayeron pese al golpe, y el partido se empantanó. El 10 sudafricano tuvo una para irse arriba, a los 36, pero la desperdició.

La Selección claramente apostó a dormir la pelota, a manejarla cerquita de la cocina y tratar de generar un penalcito. Pero en dos jugadas sucesivas Sudáfrica abortó sendos line-maul y recuperó la pelota. La línea era delgadísima. Un acierto, triunfo. Un error, derrota. Sudáfrica tuvo la última, provocó zozobra con una combinación Steyn-De Villiers pero la pelota salió volando y Landajo la sacudió a la tribuna. Fue un empate, nomás, un resultado enorme para Los Pumas en su segundo partido en la Fórmula 1 del rugby. La próxima fecha: el sábado 8 de septiembre en Wellington ante unos All Blacks que llegan afilados.

Síntesis: PT 11 y 35' penales de M. Rodríguez (P); 16' try de S. Fernández, conv. M. Rodríguez (P) y 32' penal de Morné Steyn (S). ST 8 y 13' penales de Morné Steyn (S) ; 11' penal de M. Rodríguez (P) y 24' try de Frans Steyn, conv. Morné Steyn (S).

Los Pumas: Rodrigo Roncero, Eusebio Guiñazú, Juan Figallo; Manuel Carizza, Patricio Albacete; Julio Farías Cabello, Alvaro Galindo, Juan Martín Fernández Lobbe (c); Nicolás Vergallo, Nicolás Sánchez; Horacio Agulla, Santiago Fernández, Marcelo Bosch, Gonzalo Camacho; y Martín Rodríguez.

Entraron: Marcos Ayerza, Leonardo Senatore, Tomás Leonardi, Martín Landajo y Lucas González Amorosino.

Entrenador: Santiago Phelan.

Sudáfrica: Tendai Mtawarira, Adriaan Strauss, Jannie du Plessis; Eben Etzebeth, Andries Bekker; Marcell Coetzee, Jacques Potgieter, Willem Alberts; Francois Hougaard, Morné Steyn; Lwazi Mvovo, Frans Steyn, Jean de Villiers, Bryan Habana; y Zane Kirchner.

Entraron: Tiaan Liebenberg, Pat Cilliers, Flip van der Merwe, Keegan Daniel y Ruan Pienaar.

Entrenador: Heyneke Meyer.

Cancha: Malvinas Argentinas, Mendoza.

Arbitro: Steve Walsh (Australia).

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