La norma pasará al Senado porque el bloque Mercedinos por el Cambio pidió modificaciones en tres artículos que no afectan en nada el espírtu de la ley.

Hubo dos abstenciones: las de los diputados del Frente para la Victoria Francisco Irusta (Pedernera) y Fabio Agüero (San Martín) y diecisiete en contra, de los legisladores de la alianza Cambiemos.

Por mayoría se aprobó, además, la regulación del cupo femenino: es de un 30 por ciento, pero estirable a un 50 por ciento, según lo que decida cada partido.

“La no obligatoriedad de las PASO es una ventaja para el oficialismo que, así, se va a poder meter en las internas de los demás partidos. Cuando quiera que gane un candidato en vez del otro, va a mandar todo el aparato a votar al que ellos quieren”, señaló una fuente legislativa.

Antecedente

Semanas atrás, en la Comisión de Asuntos Constitucionales de la Cámara de Diputados hubo dos dictámenes en relación a la ley de las PASO. Por un lado, el despacho mayoritario de Compromiso Federal que tiene como finalidad acatar la iniciativa del Ejecutivo sin modificaciones desde su media sanción en el Senado Provincial.

El despacho en minoría de Alejandro Cacace, Javier Giménez (Cambiemos), y Daniel González Espíndola (FpV) rechazó la iniciativa oficialista, proponiendo que las PASO deben mantenerse. “Las Primarias son una herramienta electoral sumamente importante al democratizar significativamente los comicios permitiéndole a la ciudadanía seleccionar los candidatos de los partidos políticos para las elecciones generales”, argumentó en ese moment Cacace en relación a la postura que tiene su bancada en torno a la Ley Nacional aplicada por primera vez en 2011.