Se acerca la hora clave pero el Presupuesto 2015 continúa sin definirse, ya que si bien hay convocada una sesión especial para este lunes a las 12 en la Cámara de Diputados, con la idea de tratar la “ley de leyes”, además de los proyectos de Avalúo Fiscal e Impositiva, hasta el momento no ha habido avances en los posibles acuerdos entre el oficialismo justicialista y el radicalismo, principal sector opositor, por lo que más allá de las predisposiciones de ambos bandos, persisten las dudas si hoy se podrá lograr ese tratamiento.

Es que al menos hasta el cierre de esta edición, el pedido de la UCR de tener “por escrito” todos los cambios que solicitó en las leyes para apurar su tratamiento, y que el FPV se comprometió a generar “de palabra” en el paquete de proyectos, sobre todo en Impositiva y Presupuesto, no había tenido respuesta y en esas condiciones, los radicales se niegan a darle aprobación, principalmente en las partes de la pauta de gastos en la que se pide endeudamiento, por no tener “tiempo suficiente” para analizarlo.

“No hemos recibido nada aún”, confirmaba anoche el diputado radical Martín Kerchner, añadiendo que “a lo mejor la intención es mandarlo mañana (por hoy) temprano, pero eso ya sería tarde”.

Es que desde la visión opositora, la demora impedirá estudiar los cambios requeridos con tiempo suficiente para tomar una decisión. “Si nos entregan los escritos a las 9 de la mañana, no pueden pretender que a las 12 los tengamos corregidos y listos para aprobar”, destacó Kerchner.

Las “9 de la mañana” no es un horario elegido al azar, ya que, según informaron fuentes oficialistas, esa será la hora elegida para que se reúnan representantes de ambos bloques legislativos del FPV y, en ese preciso instante, decidir cuál será su estrategia.

De hecho, las mismas fuentes avisaron que a esa hora, el ministro de Hacienda, Juan Antonio Gantús, se presentará en la Casa de las Leyes para entregar a la bancada del FPV los cambios.

Pero será esa también la hora en que los referentes radicales en temas presupuestarios se reúnan para esperar los papeles, según lo informado por el jefe del bloque de  diputados, Néstor Parés.

Tal como consignó Los Andes ayer, lo que la UCR pretende es que el oficialismo envíe “por escrito”  las promesas que se comprometió a cumplir para que ellos le aprueben el paquete fiscal.

Entre los puntos acordados oralmente para la ley Impositiva, está la implementación de la “autodeclaración de avalúo de propiedades”; el mantenimiento de los valores 2014 del Mínimo Presunto para Ingresos Brutos; el sostenimiento de igual carga impositiva que este año para el régimen simplificado; que las petroleras sigan pagando el mismo porcentaje (5%, rebajado a 3,5%) de Ingresos Brutos (no 3% como se comprometió el gobernador Francisco Pérez en el acuerdo Nación-Ofephi que auspició la nueva Ley de Hidrocarburos); y que no existan embargos preventivos sin orden judicial.

En tanto que para el Presupuesto, lo que pide el radicalismo es que desaparezcan los ítems que hablan de endeudamiento (artículos 39, 40, 41, 43, 44 y 67). Y también que se resuelva el problema de la falta de financiamiento a los partidos en campañas electorales, algo lo que perdió efecto con el decreto 2075 de Pérez, que la Legislatura aún no ratifica ni rechaza.

Sobre esto puntos, hay versiones que señalan que “el sábado por la noche” se le enviaron a los radicales los cambios en Avalúo e Impositiva, y sólo estaría faltando la propuesta presupuestaria, que es lo que llevaría hoy Gantús.

Predisposición al diálogo

Más allá de la demora en la llegada de las modificaciones comprometidas, y si bien las tensiones no cesan entre las dos principales fuerzas legislativas, la intención de que se concrete el tratamiento en el recinto parecen estar intactas.

De hecho, el propio Parés informó que convocará a su bloque recién “a las 11 de la mañana” para ver finalmente qué decisión toman. “Vamos a ver si tienen algo”, se esperanzó.

Por su lado, el presidente de la Cámara, el justicialista Jorge Tanús, dice haberse comprometido con los radicales a garantizar el diálogo.

“Si no hay acuerdo, la sesión se levanta”, dijo, buscando así bajar tensiones y apuntando a que el acuerdo final llegue. “La decisión es adecuar las leyes. Si hay que esperar para que se aprueben, esperaremos”, concluyó Tanús.