- ¿Cómo te has ensamblado en este nuevo proyecto político?

- Bien, porque con Cheppi veníamos hablando desde hace mucho tiempo, te diría que desde el 2011. Tomamos contacto por lo que iba pasando en la campaña y vimos que nos íbamos solapando en el poder político. Con el poder de fuego que él tenía en el Frente para la Victoria a nosotros en aquella ocasión nos quedó muy poco espacio para el Socialismo Marplatense. En vez de enojarnos por es intentamos juntarnos y tener reuniones con él. Tiene una propuesta muy interesante para 2015 que nosotros debemos afianzar en esta etapa que es justamente crear una nueva gestión para la ciudad que tenga que ver con la industrialización y que diversifique la matriz productiva de Mar del Plata que está pensada para un sector muy pequeño del turismo. Creemos que es muy importante que esa propuesta se lleve a cabo porque es lo único nuevo que ha aparecido en Mar del Plata.

- Esa es la propuesta de Cheppi.

- En parte es muy parecida a la propuesta del socialismo. Lo que sucede es que el socialismo estaba en un marco casi testimonial y ahora vemos que hay un montón de ideas que se pueden llevar a cabo.

- ¿Creés que con una empresa cada tanto para la inversión alcanza?

- Yo creo que es importante que venga una empresa como Zanella, que se amplíe el parque industrial y se generen nuevos. Creemos que es importante que en Mar del Plata pueda haber nuevas alternativas de desarrollo porque el turismo, sin desmerecerlo, ya le ha dado a la ciudad todo lo que le puede dar. Nosotros no podemos tener más playa. Si seguimos favoreciendo a los sectores concentrados de la economía marplatense como se está haciendo y no nos movemos de ahí sólo podemos lograr que ese sector gane más dinero. Pero no vamos a lograr que bajen los índices de desocupación que tiene la ciudad. Eso se hace diversificando la matriz productiva. Además, hay que tener una propuesta de transformación para el puerto. Tiene que ser una usina donde salga toda la mercadería de la zona del sudeste de la provincia de Buenos Aires. Hay que adaptarlo a eso para tener inversiones que vayan en sintonía con el proyecto. Esas cosas hay que plantearlas en un esquema de planificación y las inversiones que vengan serán buenas, pero planificadas serán mucho más permanentes para sacar la ciudad adelante.

- ¿Pensás que hay que motivar la ingeniería informática en la ciudad?

- Acá hay grupos de trabajo importante que han desarrollado software en universidades. A diferencia de Tandil, allá está la universidad. Pero acá tenemos un grupo muy importante. Consideramos que es una industria grande porque prácticamente no requiere más inversión que el propio trabajo, que es lo que necesitamos.

- Tandil lo es. Pero, ¿no podría Mar del Plata también ser un polo en esa materia?

- Tranquilamente. Hay empresas y grupos que trabajan en la universidad con el desarrollo de software y software libre. Esta es una asignatura pendiente que tiene Argentina, por lo menos en el estado nacional. Tiene que adoptar esas herramientas que sirven en forma estratégica porque hace que el estado pueda manejar sus datos de manera fehaciente. Todo eso en Mar del Plata hay, pero creo que eso lo tenemos que potenciar.

- En un tiempo se arrancó la Dirección de la Producción que fue llevado a Secretaría. Hoy hay un área pero no la noto con tanto peso.

- Creo que el problema que pasa en la gestión no depende tanto del área sino del interés político de la cabeza de la política de la ciudad. Está claro que este gobierno tiene intereses concretos para defender los beneficios de un sector concreto del turismo. Un sector relacionado con los capitales del diario La Capital. En esas cosas el Intendente es eficiente en eso, porque cuando tiene que comprar un predio de basura que pertenece a Aldrey Iglesias lo compra sin ningún problema y se le retribuye en exceso lo que vale un predio. Esas cosas, él las hace prolijamente. Pero el Intendente falla en la gestión. Las calles siguen rotas, en la salud pone a encabezar su lista a una persona que es el estigma de la salud de Gustavo Pulti.

- Hablamos de Alejandro Ferro.

- Ahora bien, es el gestor de la salud y pudo llevar adelante el CEMA. El que puede ver en Ferro una buena gestión de salud es porque no usa el sistema público de salud. Entonces la clase media que puede ver las cosas desde afuera ve que en esas cosas se han avanzado. Pero si vamos a cualquier barrio y consultamos con cualquier usuario del sector público, vemos que tienen que pedir turnos a las 5 de la mañana, que dan cinco turnos, no hay pediatras, tienen que ir otro día. La salud está colapsada. Es una de las pocas campañas electorales en donde el tema de la salud sale en todos los barrios cuando se habla con la gente. Está la gestión que se muestra en los diarios y la gestión propiamente dicha.