De acuerdo a los datos recogidos de fuentes policiales, el comerciante concurrió a la sucursal local del Banco de La Pampa -en 22 y 15-, para cobrar un cheque del Supermercado De León por 50 mil pesos.

Cuando salió del edificio de la entidad bancaria, fue abordado y asaltado por dos personas que se movilizaban a bordo de un auto compacto, de tamaño reducido.

Los desconocidos lo redujeron y lo subieron al vehículo, privándolo de su libertad y luego habrían huído hacia el norte de la provincia, hacia la zona de Speluzzi, donde dejaron abandonado al hombre de 57 años, a quien lo despojaron de los 50 mil pesos que minutos antes había cobrado.

Personal policial de la Comisaría Primera, Brigada de Investigaciones y otras dependencias de la UR II, trabajan para interceptar a los sospechosos.

EL AVISO, 2 HORAS DESPUES

Durante su relato a las fuerzas policiales, el comerciante asaltado relató que tardó prácticamente dos horas en dar aviso de la situación, ya que fue abandonado en una zona rural para el desconocida, primero fue hasta un predio donde no encontró a nadie y recién después llegó hasta la ruta pavimentada donde fue auxiliado y desde donde comunicó sus peripecias a la policía.

Sastre conduce una empresa netamente familiar que distribuye pollos y huevos entre los comercios de la zona y tiene numerosos clientes en General Pico.

Supone que lo han venido siguiendo. Tras abordarlo en 22 entre 15 y 13, los delincuentes lo obligaron a subir al vehículo de pequeñas dimensiones cuya marca o modelo no pudo identificar. Dieron varias vueltas para evitar que pudiera ubicarse y marcharon hacia la zona rural de Speluzzi, donde finalmente abandonaron, despojándolo del dinero y de sus pertenencias.

Ahora ya trabaja la División Criminalística de Santa Rosa, ante la que el hombre ofrecerá un dictado de rostro para confeccionar el identikit de los dos sospechosos.

No se ha podido corroborar aún, pero debe suponerse que la policía podría encontrar importante ayuda en las cámaras de seguridad instaladas en la esquina de 22 y 15. Desde allí debió observarse con nítida claridad cuando el hombre fue subido al pequeño vehículo en el que lo mantuvieron secuestrado.