Una de las sorpresas de la noche del domingo, cuando se conocieron los resultados provisorios de las PASO, fue el revés en las urnas de los candidatos de Cambiemos en Santa Lucía, el pago del basualdista Marcelo Orrego.

Se trata del jefe comunal que, según encuestas previas, tiene una alta imagen positiva y que incluso viene sonando con muchas chances para ser el candidato a gobernador del armado opositor que lideran Roberto Basualdo y Eduardo Cáceres para 2019. Para entender el fenómeno, los dirigentes sostienen que el buen perfil del intendente no logró trasladarse a los postulantes del espacio y a que él mismo no formaba parte de la boleta de Cambiemos por San Juan. Además, señalan que otro factor de la victoria del oficialismo provincial fue que el PJ dejó atrás sus divisiones y trabajó de forma unida.

Santa Lucía es clave para el basualdismo, espacio que es el principal sostén de Cambiemos. El distrito está en manos de un hombre del núcleo duro del senador Basualdo, que va por su segundo mandato con un gran nivel de aceptación.

En la práctica, los resultados provisorios arrojaron que el Frente Todos, que llevaba al hermano del Gobernador, Rubén Uñac, de candidato a senador, y a Walberto Allende, unos de los ministros con mejor imagen, de postulante a diputado nacional, se impuso por poco más de 6 puntos, al obtener el 42,59% de los votos, frente al 36,49% de Cambiemos, que llevaba a Basualdo y a Cáceres en la boleta.

El propio Orrego dijo ayer que la elección no debía leerse como que se había “plebiscitado” su gestión. “Son cosas distintas”, sostuvo y que él, por el contrario, entendía que Cambiemos había hecho una “gran elección” en ese departamento. De todos modos, reconoció que había que “redoblar” el esfuerzo para conseguir un buen resultado en las legislativas de octubre.

Si bien el dirigente repite a quien lo escuche que en ningún momento ha dado a conocer su voluntad de ser candidato a Gobernador para 2019, lo cierto es que su nombre viene sonando con fuerza y que incluso se lo mencionó para las generales del 2015. Pero él priorizó su proyecto departamental. “Mi aspiración es que me recuerden como el mejor intendente que ha tenido Santa Lucía”, sostuvo.

Desde el lado del justicialismo, entre las razones del resultado lo atribuyen a que, como no ocurría desde hace tiempo, el PJ se ha logrado unir en el distrito y que todos “tiraron” para el mismo lado, encolumnados bajo la figura del gobernador Uñac.

La Junta Departamental del PJ está ahora en manos de Lucio González, exconcejal y actual director de Emergencia Social. El dirigente destacó el trabajo realizado, aunque aclaró que “no nos sentimos triunfadores”, sino que, por el contrario, van a renovar el esfuerzo para las elecciones de octubre.

Hasta la llegada de Orrego, en 2011, el municipio de Santa Lucía estuvo conducido por el justicialismo, de la mano de Aníbal Fuentes, quien llevaba un mandato en el puesto y peleó la reelección, sin suerte. Por eso este buen resultado anima a los dirigentes departamentales a tratar de recuperar el distrito. “Tenemos una esperanza para 2019”, dijo González.

La tarea que tiene por delante ahora el peronismo santaluceño es empezar a buscar una figura que puede aglutinar a todos los sectores.

En el entorno del jefe comunal pusieron énfasis en que Orrego no iba en la boleta y que si bien su figura tiene mucha aceptación, no ocurre lo mismo, en algunos sectores, con el propio Basualdo o con Cáceres. Y que otra hubiera sido la historia si el propio candidato hubiera sido el intendente.

Este departamento forma parte del lote de los distritos en los que el basualdismo, aliado clave de Cambiemos, no logró obtener buenos resultados. Los otros son Rivadavia (ver aparte), Caucete, 9 de Julio y Ullum. Precisamente, como el propio Orrego no puede repetir su mandato, también se ha abierto la especulación sobre quién podría ser su sucesor. Y el primer nombre que aparece en la lista es el de su hermano y diputado, Juan José Orrego. Todavía nadie se ha pronunciado oficialmente sobre el tema, pero lo cierto es que el nombre del dirigente ya suena en los pasillos de la comuna.