La primera ministra británica, Theresa May, dijo este martes que el Reino Unido no tendrá una posición "suplicante" en las negociaciones con la Unión Europea para el "brexit", sino que las afrontará como Estado "independiente y soberano".

May también alertó de que habrá "baches en el camino" en el proceso de separación del bloque europeo, en declaraciones a la BBC antes de asistir a la tercera jornada del congreso anual del Partido Conservador en Birmingham.

Las palabras de la líder "tory", que reiteró además que su prioridad es controlar la inmigración, sugieren que se decanta por el llamado "brexit" duro, es decir, por cortar todos los lazos con Bruselas, incluyendo salir del mercado único, y negociar una nueva relación con los 27.

"No creo que el Reino Unido deba, de ninguna manera, suplicar. Se trata de reciprocidad: un buen acuerdo comercial nos va a beneficiar a nosotros y a la UE", manifestó en declaraciones citadas por la agencia EFE.

May subrayó que, una vez salgan del bloque, "habrá la oportunidad de controlar el movimiento (de personas) desde la UE".

"Creo que, esencialmente, lo que la gente votó el 23 de junio es que su Gobierno pueda tomar ese tipo de decisiones", dijo May, que durante la campaña del referéndum sobre la UE respaldó la permanencia pero discretamente y con reservas.

La libra esterlina cayó a su valor mínimo desde 1985 por el temor de los inversores a que el Gobierno británico opte por un "brexit" duro", con la salida del mercado único.

Los mercados siguen con atención el congreso conservador, que concluye este miércoles con un discurso de Theresa May, para detectar indicaciones sobre las futuras negociaciones del "brexit".

May anunció el domingo pasado que activará antes de finales del próximo marzo el artículo 50 del Tratado de Lisboa, que dará inicio a las negociaciones con Bruselas.