La Presidenta enfureció cuando vio las encuestas realizadas tras la inundación que azotó a la ciudad de La Plata y dejó unas 67 víctimas fatales. Es que la imagen de Cristina no para de caer en las mediciones de la capital provincial.

La Jefa de Estado considera que el gobernador Daniel Scioli, y el intendente, Pablo Bruera, son los verdaderos responsables de la tragedia. Sin embargo, los sondeos de opinión arrojan otro resultado.

Un trabajo en profundidad realizado en La Plata en los últimos días arroja resultados desalentadores para la Casa Rosada. La imagen negativa de Cristina trepó tras la inundación del 2 de abril a un 54%. Muy por encima de Scioli y Bruera.

Quien también se refleja perjudicado por la tragedia es el jefe comunal con una 50% de imagen positiva y más abajo Daniel Scioli, con un 32%.

El tema enfurece a la Presidenta. Por eso, salió a cuestionar en primer lugar a Bruera, más tarde las obras que no se hicieron y finalmente la investigación judicial por las víctimas fatales.

Un caso: La cadena nacional casi extemporánea del jueves pasado en la que aportó algunos detalles sobre el plan de ayuda para los afectados por la inundación.

Ese día, Cristina se metió por primera vez en la polémica por el número de fallecidos. Sin mencionar al gobierno provincial, la Presidenta habló de “patéticas miserabilidades que no deben existir en autoridades con ese nivel de responsabilidad”.

Pero además, apuntó -también sin mencionarlo- a Bruera, y aseguró que "hubo decidía o falta de políticas para prever estas tragedias” en las jurisdicciones afectadas.

Es que las encuestas reflejan además la sensación que quedó en La Plata sobre el promocionado operativo de “solidaridad” realizado por La Cámpora en la Facultad de Periodismo de La Plata. Según un trabajo, casi el 30 % de los platenses consideran que ese operativo fue “oportunista”.

Hoy, la Presidenta volvió a meterse con el tema de las víctimas de la inundación en una catarata de tuits en la que negó que haya enviado a "una secretaria privada" para pedir "disculpas" por un supuesto entredicho con el juez de Garantías Guillermo.

Es que -como adelantó LPO- el magistrado reveló que "una secretaria privada" de la mandataria le aclaró que la Casa Rosada había tenido "mala información" sobre sus declaraciones, en las que advirtió que "nunca nadie podrá determinar el número real" de víctimas.

"Es de público y notorio conocimiento que no tengo ni tuve secretaria privada. No tuve ningún entredicho con nadie sobre víctimas. No envié a hablar a nadie con el juez Atencio ni con ningún otro. ¿Cuál sería la razón para hacerlo?", afirmó hoy la Presidenta, en su cuenta personal de Twitter.

Y agregó: "No tengo mala información y como van las cosas, me parece que los que tienen o tenían mala (o falsa?) información sobre las víctimas de la inundación son otros".