El presidente del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas(Conicet), Roberto Carlos Salvarezza destacó los avances en Ciencia y Tecnología en el norte del país durante su paso por Tucumán, donde participó de la inauguración de la primera planta nacional de biotecnología con Buenas Prácticas de Fabricación(BPF). 

Para Salvarezza, el crecimiento del desarrollo de la ciencia y la técnica se debe a la inversión que se hace a partir de un modelo de país que apuesta a la ciencia y a la técnica. “Hubo épocas en las que el modelo de país pasaba por otro lado, por lo financiero, por ejemplo. Hoy la ciencia y la técnica deciden en qué modelo de país jugamos”, dijo el titular del Conicet. 

“Un chico argentino de cualquier situación social puede ser un investigador porque el Estado le financia toda la educación: la primaria, la secundaria, la universitaria y toda la carrera de investigador, además tiene becas para doctorarse”, aseguró.

Tras una década de crecimiento del sistema científico argentino, la mirada del Conicet está puesta en la federalización: “Estamos trabajando codo a codo con las universidades locales, en lugares donde el Conicet tenía poca presencia. Así hemos creado centros de investigación y transferencia en Formosa, Santiago del Estero (hacia donde hemos repatriado muchos científicos), Jujuy y Catamarca. Hoy el gran desafío para Conicet “es reforzar la transferencia de los institutos hacia las empresas y el Estado”, dice. “Por eso les pedimos a las universidades de las provincias que nos digan cuáles son los temas que necesitan investigar. A partir de allí armamos proyectos conjuntos con la provincia y la universidad local para resolver problemáticas regionales”, sostiene.

A juicio de Salvarezza, Argentina es un país “fuerte” en la investigación de las ciencias biológicas, en física y química. “Tenemos tres premios Nobel en la Argentina. La apuesta es que podamos usar toda esta ciencia básica, todo este conocimiento que tenemos en las necesidades de las empresas y del Estado, por eso les pedimos a las Pymes que se acerquen a este reactor de conocimiento para orientarlo en las necesidades”.

Un trabajo conjunto con la UNSE

Con el paso de los años, la gestión conjunta Conicet-UNSE dio sus frutos y actualmente cuenta con 22 investigadores del Consejo, 16 de la UNSE, 8 miembros de la carrera del personal de apoyo, 4 técnicos de la universidad y 32 becarios del Consejo”.

No obstante, en Argentina hay transferencia directa de conocimiento desde los institutos hacia las empresas. “Por ejemplo, una fábrica de cerámica que pidió mejorar la calidad del horno”. El tercer objetivo es que más chicos se interesen por las ciencias duras y para ello se han lanzado varios programas. “Todo esto se enmarca en un modelo que nos permite pasar de una economía de capital a una economía de conocimiento”, resume.