Por Diego Lanese

 

La semana pasada, unos cien operarios de la firma Extreme Gear, una fábrica de zapatillas que trabaja para Adidas y está ubicada en Esteban Echeverría, cortaron Camino de Cintura para rechazar la decisión de la empresa de cesantear a buena parte del personal y amenazar con nuevos despidos. Los nombres de las plantas que ganan notoriedad por la lucha de sus empleados contra los despidos se multiplican, y en el último tiempo no dan respiro. Pepsico, Cresta Roja, Atanor, son algunos de los ejemplos de la lucha contra el desempleo, hoy una amenaza tan cercana que trae viejas imágenes que parecían perdidas.

Si durante el kirchnerismo la desocupación era difícil de calcular por una suma de la destrucción de las estadísticas y la distorsión que generaron los planes, durante la gestión de Mauricio Macri lo difícil parece ser mantener actualizada la cuenta de despidos, cierres y suspensiones. Al punto que un informe denuncia que la actual tasa de desempleo en la provincia de Buenos Aires es la más alta de los últimos diez años.

Se trata de cifras vertidas por la CTA de los Trabajadores para el primer trimestre del año. En ese mismo período, agrega el trabajo, hubo “nula creación de empleo” en el sector privado, lo que hace más complejo el panorama. Para esta central obrera, los despidos son la cuestión más preocupante para el movimiento obrero, y pidieron que sea parte de la discusión electoral.

Los datos sobre desempleo fueron aportados por el Centro de Información y Formación de la República Argentina (CIFRA), una entidad de la CTA de los Trabajadores, que difundió la semana pasada su último informe trimestral. En el mismo, aseguró que la tasa de desempleoes “la más alta en los últimos diez años”, ubicándose en el 11,3 por ciento para los grandes conglomerados de la provincia de Buenos Aires.

“La tasa de desocupación del primer trimestre de 2017 registró un salto hacia arriba por efecto del aumento de la tasa de actividad (es decir, más personas buscan empleo y no lo encuentran) y, en menor medida, por la caída del empleo”, explicó el trabajo de la CTA, al que tuvo acceso Política del Sur.

En el conjunto de los aglomerados urbanos relevados por la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) -analiza CIFRA- la tasa de desocupación “alcanzó el 9,2 por ciento de la población económicamente activa, guarismo que salta al 11,3 por ciento en los aglomerados correspondientes a la provincia de Buenos Aires”.

“Si bien no hay datos correspondientes al primer trimestre de 2016 para efectuar la comparación interanual, hay que remontarse al primer trimestre de 2007 para advertir una tasa de desocupación más elevada que la que se registró en el primer trimestre de 2017”, destacó el centro de investigación. Cabe destacar que los conglomerados medidos por CIFRA en la provincia son los distritos del Gran Buenos Aires, el Gran La Plata, Mar del Plata, Bahía Blanca-Cerri, San Nicolás-Villa Constitución, Viedma-Carmen de Patagones.

Perspectiva local

Para Hugo Durán, titular de la CTA de Lanús, “la desocupación es el tema más preocupante para los trabajadores argentinos”. “Está condicionando toda la situación laboral, veníamos de paritarias funcionando por encima de la inflación, recuperando derechos laborales, y el hecho de garantizar un puesto de trabajo cuando se están cerrando fábricas y comercios hace que muchos compañeros acepten condiciones indignas, porque la disyuntiva es aceptar eso o quedarse en la calle”, agregó el dirigente, en diálogo con Política del Sur.

Muchos despidos -asegura Durán- funcionan como disciplinadores de los trabajadores, “como pasa en Walmart de Avellaneda, que echaron a 50 trabajadores y los reincorporarían, pero por contrato y en condiciones inferiores. Lo mismo funcionan las paritarias ala baja. Todo esto es consecuencia de la desocupación”.

En el ámbito local, Durán dijo que en Lanús están “sufriendo de manera importante el desempleo, hay curtiembres que están cerrando o suspendiendo personal, en Valentín Alsina industrias del plástico están en esa situación, lo mismo empresas en Villa Jardín, donde los empresarios dicen que no pueden sostener la producción con la entrada de las importaciones, sobre todo de Brasil”. “Estamos en un marco de una política económicaque no favorece la producción nacional, que no solo afecta a los trabajadores,sino además al empresario local, que produce para un mercado interno que se achica”, destacó el dirigente sindical.

El panorama sombrío se completa con otro indicador muy negativo para el inicio del 2017: la “nula creación de empleo asalariado en el sector privado”. Según el informe de CIFRA, más allá de la leve recuperación económica, “no se observa en los primeros meses de 2017 que exista creación de empleo asalariado registrado en el sector privado. Entre abril de 2016 y el mismo mes de 2017 se crearon solo 5 mil puestos, es decir, un incremento de 0,1 por ciento”, agregó el trabajo.

El aumento de casi 49 mil puestos asalariados registrados totales obedece a la suma de 32.700 puestos en el sector público (+1,1 por ciento) y 11 mil en el servicio doméstico registrado (+2,4 por ciento). En el mismo período se observa, en cambio, un incremento en el número de trabajadores independientes registrados en AFIP como monotributistas y monotributistas sociales, que en conjunto superan los 90 mil trabajadores adicionales, según los datos de CIFRA.

Todo este panorama hace pensar a la dirigencia sindical que el objetivo final de este modelo es imponer la flexibilización laboral. “Ya tienen en la gatera una nueva ley de flexibilización laboral, como la que aprobó Brasil, que en los hechos se empezó a dar con estas situaciones que se vienen dando. Un trabajador que lo van a echar, que tiene que mantener a su familia, acepta situaciones que antes no aceptaría, cuando había consumo interno y producción. Pero la baja de salarios y la entrada de importados, sumado a la devaluación, hacen un coctel bastante complicado”, explicó Durán.

Por eso, para el dirigente de Lanús es necesario que en la campaña se discuta el modelo económico del gobierno nacional y de la provincia de Buenos Aires. “Los compañeros se van dando cuenta que acá lo que está en juego son los salarios, el sistema jubilatorio. Cuánto va a incidir en las elecciones, no lo sabemos, es otra ecuación que va a restar votos al oficialismo, seguro. A donde van esos votos, no lo podemos saber, porque muchos ya se dieron cuenta qué significa el cambio para los trabajadores”, se quejó. Es que para Durán el macrista es “un proyecto económico para un modelo de país”.