ouvier, ingresó a Plaza 9 de Julio, caminando de manera pausada, por calle España, junto a otros familiares y periodistas que llegaron junto a él desde Francia, y dos traductores, veinte minutos antes de la hora convenida, para que se iniciara la manifestación.

Las pancartas con los nombres, pedidos de justicia, fotos de hijos, hermanos, padres, desaparecidos, muertos en accidentes de tránsito, homicidios, etc, fueron colocados sobre la vereda, ubicada al frente de la Catedral.

Bouvier, al igual que quienes llegaron de Francia, era la primera vez que asistían a la manifestación que esta vez llegó con velas blancas encendidas.

En una improvisada conferencia de prensa, el padre de Cassandre desmintió las versiones que hablaban que los asesinatos de las turistas, fueron provocados por el poder político que se había visto amenazado, por una supuesta investigación iniciada por una ONG de Francia, para conocer el destino que se les otorgaba a los fondos enviados, para ayudar a comunidades de pueblos originarios.

En ese mismo tenor desmintió, que su familia este solventando a la defensa de alguno de los acusados.

Los manifestantes convocados en el día de ayer se acercaba a los dos centenares, y Bouvier señaló que “desde su país defensor de la justicia se sentía cercano al dolor de todos los que marchan cada viernes”.

Bouvier, con una mueca de dolor, pidio que se respete, la situación, que lo médiatico no le avance al sentido de la marcha.

“Es un proceso muy dificil y lo será peor, cuando se inicie el proceso judicial”, agregó.

Al hacer referencia a la jornada del juicio en la que la que deberá ahondar en la vida de su hija, lo definió como muy doloroso, ya que se truncó la vida de dos jovencitas, con un gran corazón, y muy inteligentes.”Tenían una vida por delante”.

Así también dijo ser defensor de una vida para las mujeres en libertad, sin el miedo de ser atacadas.

“Quiero justicia y que quien sea responsable, se haga cargo”, destacó.

Juanto a los Familiares de Víctimas de la Impunidad, tambien marchó el padre de María Cash, Federico, quien reclama se conozca que sucedió con su hija. Los más de 60 casos que esperan resolución, dieron vuelta a las cuatro cuadras de la Plaza 9 de Julio y se detuvieron frente a la Catedral, donde dijeron que” la iglesia en la figura de Monseñor Mario Cargnello, les dio la espalda”.