Si bien no todos los chicos bahienses de entre 14 y 18 años de edad que se alcoholizaron alguna vez consumen en forma abusiva, una investigación preliminar a la que tuvo acceso “La Nueva.” determinó que mientras los adolescentes que no se alcoholizan tienen un nivel medio de educación asistencial personalizada por parte del padre, los que se alcoholizan entre cinco y ocho veces en el mes poseen un alto nivel de permisivismo.

El trabajo, que estudió la relación existente entre los patrones de consumo de alcohol de los adolescentes bahienses entre 14 y 18 años con los estilos educativos parentales, concluyó que un estilo educativo de la madre basado en la restricción (excesiva actitud de control y seriedad junto con manifestaciones de rechazo, abandono o falta de afecto), es entre alto y muy alto en los adolescentes que consumen alcohol en forma abusiva a diferencia de los abstemios, donde resulta medio.

“Los adolescentes que consumen alcohol en forma abusiva se sienten afectivamente marginados por la madre a diferencia de los abstemios”, menciona el trabajo.

Además, precisó que los adolescentes que consumen de forma abusiva pertenecientes a hogares con necesidades básicas satisfechas (NBS) presentan una tendencia media a no manifestar respeto por los demás, a ser agresivos o desafiantes, así como a ir en contra de las normas establecidas, mientras que los que consumen en forma abusiva, pero pertenecen a hogares con necesidades básicas insatisfechas (NBI), tienen un nivel entre casi alto y muy alto.

El trabajo de investigación, denominado “Análisis de los estilos parentales educativos de los adolescentes entre 14 y 18 años que consumen alcohol en la ciudad de Bahía Blanca”, fue dirigido por la doctora en Psicología Claudia Amigo, a quien acompañaron la profesora Susana Teler y los licenciados Agustín Sartuqui y Felicia Cavilla.

De la muestra, que fue no probabilística voluntaria y seleccionada en forma intencional, participaron adolescentes de ambos sexos entre 14 y 18 años, que concurren a instituciones y escuelas medias privadas y estatales de la ciudad.

Resultados

El propósito final del trabajo apunta a crear un programa de intervención educativo-preventivo para la comunidad abordando no solo a los adolescentes sino también implicando a sus padres a fin de crear un ambiente familiar positivo y, además, ofrecer a los hijos un modelo racional y controlado en el consumo de alcohol.

Entre los resultados obtenidos pueden encontrarse los siguientes:

- Las bebidas que se consume con más frecuencia durante el día por los adolescentes de 14 a 18 años son: aperitivos (19%), cerveza (17%), combinados (10%), vino y licor (6%) y champán (4%).

- Los fines de semana las bebidas que se consumen con mayor frecuencia son: cerveza (83%), aperitivos (63%), combinados (42%) y, vino, licores y champán (25%).

-El 58% de la muestra se emborrachó alguna vez.

-Los adolescentes tuvieron la primera borrachera entre los 13 y 16 años.

-En el último mes el 26% se emborrachó entre 1 y 4 veces y el 7% entre 5 y 8 veces.

-El 48% de los adolescentes que consumen de forma abusiva bebidas alcohólicas tienen a sus padres separados.

-Los adolescentes que no consumen en forma abusiva no presentan inadaptación personal (implica tanto el desajuste emocional: baja autoestima, inseguridad, insatisfacción, inoperancia, autoengaño como la dificultad para aceptar la realidad tal como es) y es bajo el nivel de inadaptación escolar a diferencia de los que consumen en forma abusiva.

-Los adolescentes que consumen en forma abusiva presentan un nivel alto de baja autoestima.

-Los adolescentes abstemios tienen un nivel medio en el área personal de lo que se denomina cogniafección, es decir, la tendencia a “encogerse” o a “retirarse” como consecuencia de la insatisfacción y el miedo, mientras que los que consumen de forma abusiva presentan un nivel alto.

- Los adolescentes abstemios tienen un nivel medio en el área personal de Cognipunición (tendencia a presionarse o golpearse con predominio del sufrimiento), a diferencia de los que consumen de forma abusiva que presentan un nivel casi alto.

- Los que consumen de forma abusiva presentan un nivel entre alto y muy alto de depresión a diferencia de los abstemios.

Consumo

Los fundamentos de l estudio

A nivel nacional el consumo de alcohol y tabaco de los adolescentes entre 12 y 17 años, alcanzan las prevalencias más altas, seguida por el consumo de marihuana: el 42% de la población consume alcohol, el 15% tabaco y el 3% marihuana.

A los 13 años, 1 de cada 10 adolescentes refiere consumir alcohol. A partir de los 17 años, 8 de cada 10 consumen alcohol. Entre los 14 y los 15 años se incrementa la intensidad y la frecuencia de consumo de alcohol y tabaco, así como el inicio del consumo de drogas, y en particular, de marihuana (SEDRONAR, 2010).

Hay investigaciones realizadas sobre la relación existente entre patrones educativos familiares y el consumo regular de alcohol en adolescentes (Pons Diez, 1997), pero no se registran antecedentes de estos estudios en la ciudad de Bahía Blanca.

Asimismo, se escucha en el discurso social que los adolescentes no respetan a la autoridad, que los padres no controlan a sus hijos siendo permisivos y que estos factores influyen en el descontrol y en el consumo abusivo de alcohol, pero no existen investigaciones científicas que avalen estos dichos.