A partir de mañana, los jubilados de la Anses podrán saber si están o no incluidos en el plan de recomposición de haberes y pago de juicios contemplado en la ley 27.260, recientemente promulgada. Según dijo ayer a LA NACION el director del organismo previsional, Emilio Basavilbaso, mañana se publicará en el Boletín Oficial el decreto reglamentario y se habilitará entonces el mecanismo para conocer cuál es la situación de cada jubilado.

Tal como se informó ayer, esa consulta, que se hará en la página web del organismo, será el primer paso de la puesta en marcha del programa de "reparación histórica" con los jubilados, que contempla poner los ingresos de los pasivos a tono con lo dispuesto por la Corte Suprema en cuatro sentencias. Según especificó Basavilbaso, un millón de pasivos -es decir, el 40% de todos quienes podrán acceder al plan- cobran actualmente el haber mínimo.

Para poder conocer si se está dentro del grupo de beneficiarios o no, la persona debe tramitar una clave de la seguridad social en la página www.anses.gob.ar. Es un trámite que puede hacerse en su totalidad por la Web si se responde correctamente a tres preguntas que hace el sistema, para corroborar la identidad de quien está gestionando su código de acceso. El primer paso es ingresar a la solapa Mi Anses, y luego se deben seguir los pasos desde el apartado Crear clave.

El siguiente paso del plan -que es de adhesión voluntaria- llegará el 1° de septiembre, cuando podrá conocerse cuál es la oferta del Gobierno en cuanto al monto de haber mensual y -sólo en caso de que el jubilado haya iniciado un juicio con anterioridad a junio de este año- de la retroactividad. Es entonces cuando se tendrán los datos que permitirán analizar, en cada caso, la conveniencia de adherir o no. Al dar una respuesta positiva, se renuncia a hacer un juicio contra el Estado en el futuro.

Una vez aceptado, el acuerdo se suscribirá utilizando la huella digital, que debe estar previamente registrada en el banco donde se cobra o en una oficina de la Anses, y el expediente irá al fuero de la Seguridad Social, donde un juez deberá homologarlo. El titular de la Anses dijo ser optimista respecto de que se pueda cumplir con el objetivo de comenzar con los pagos durante este año. La prioridad será para los mayores de 80 años y para quienes tengan enfermedades graves acreditadas.

De cada acuerdo deberá participar un abogado, que será elegido por el beneficiario. Según fuentes de la Anses, en los casos sin juicio previo los profesionales recibirán un pago de $ 500 por acuerdo (no incluye gastos), y el pago estará a cargo del organismo.

La mejora en el monto de los ingresos mensuales sería, en promedio y según estimaciones de la Anses, de entre 30 y 40%, con un rango muy amplio de subas posibles. La recomposición tendrá menor peso para quienes se jubilaron en forma más reciente. Esto es así porque, en el recálculo del ingreso jubilatorio, lo que varía es la manera de actualizar el valor histórico de los salarios que forman parte de la fórmula para determinar el haber inicial. Y ese cambio se aplica hasta los salarios de 2008.

Además de ese recálculo del haber -que se hace en función de lo que la Corte resolvió en la causa Elliff, aunque usando un índice diferente al elegido por los jueces- se contemplará la aplicación de lo dicho en el fallo Badaro, según el cual las jubilaciones y pensiones debieron haber aumentado, entre 2002 y 2006, al ritmo de la evolución de un índice de salarios, algo que no ocurrió en cientos de miles de casos.

Polémica por el uso de datos

Las diputadas Graciela Camaño, Victoria Donda y Alicia Ciciliani criticaron el acuerdo que permite a la Secretaría de Comunicación Pública usar bases de datos de la Anses para la política comunicacional del Gobierno. Camaño advirtió que hará una presentación judicial para frenar la decisión publicada ayer en el Boletín Oficial porque "viola el derecho de hábeas data", señaló.

Los datos incluidos son nombre y apellido, DNI, CUIT/CUIL, domicilio, teléfono, correo electrónico, fecha de nacimiento, estado civil y estudios, y "no serán usados para hacer campaña política", dijo una fuente de la Secretaría. "El objetivo es llegar directo a la gente con la comunicación oficial", agregó.