Ya descartada para siempre una posible re-re-reelección, en Casa de Gobierno se echan culpas unos a otros, mientras intentan imaginar alternativas de sucesión.

Dos potenciales candidatos para 2015, el "goloso" Juan Manzur y "López Rega" Osvaldo Jaldo, están quedando chamuscados por las furibundas críticas internas.

Al primero le apuntan por su imagen insulsa, su desconexión con las bases peronistas, y su irrefrenable vocación inmobiliaria, aún en medio de la campaña electoral. Esto último habría colaborado fuertemente a la estrepitosa caída de Alperovich en Yerba Buena, donde el insaciable ministro-vicegobernador se edificó una fastuosa mansión y les está comprando las casas a todos los vecinos.

En el caso de "lopecito", se lo acusa de haber dilapidado fortunas del Estado en bolsones, matones y vehículos que no sirvieron para detener la sangría de votos. La imagen de las patotas del multimillonario Jaldo también colaboró a ahuyentar a la clase media que en otras épocas había apoyado al gobernador.

Sin postulantes propios para la gobernación, y con los Mellizos Orellana organizando a las huestes peronistas en todo el territorio para tomar el control del Partido Justicialista, Alperovich tendrá que inventar algunas ilusiones para ir conteniendo a la tropa.

A uno de los cráneos del gobierno en las últimas horas se le ocurrió postular al Zar como intendente de la Capital, según confió el periodista Ariel Fernández en las redes sociales.

Enterados del rumor, desde el radicalismo anticiparon que en ese caso José Cano también buscaría la intendencia, para jugar en el terreno que le resulta más favorable, y darle el golpe de gracia a Alperovich.

Habrá que ver si el gobernador se anima esta vez a una batalla mano a mano con el ascendente radical. Ya se borró una vez, cuando se decidían las candidaturas a diputados. Alperovich tenía buenas encuestas que le anticipaban lo que podía lograr Cano en las urnas, y por eso prefirió apartarse.