Descalifican el basurero de Quiroga

La directora del proyecto provincial lo tildó de “mamarracho”. El intendente salió a mostrar la luz verde que le dio Nación para una planta ambientan regional. Le dijeron que en el actual relleno hay 300 personas en “condiciones paupérrimas”.

La directora del proyecto Girsu de la Agencia de Inversiones del Neuquén (ADI NQN), María del Carmen Sambrín, calificó la iniciativa de la municipalidad neuquina como “un mamarracho técnico, mal plagiado y con importantísimas falencias logísticas, técnicas y ambientales”. Fue en respuesta a las declaraciones del intendente Horacio Quiroga, quien salió a mostrar un aval de Nación para avanzar en un basurero regional para 16 ciudades.

“Busca desatar el conflicto con el gobierno provincial por la puesta en marcha del Proyecto Girsu, sobre el cual la provincia se encuentra trabajando hace más de 30 años y que cuenta con el aval de la mayoría de los municipios involucrados”, dijo la funcionaria. Sambrín le cuestionó a Quiroga que su iniciativa está lejos de dar respuesta a un tratamiento integral de los residuos y enumeró que en el relleno sanitario trabajan 300 personas reciclando “en condiciones paupérrimas de vida”, que sólo cuenta con una prueba piloto de captación de biogás de una celda de relleno sanitario y que la planta de reciclaje sólo trataría el 10% de los residuos generados en la capital, enterrando todo el resto de la basura.

Además, criticó que el actual lugar está “colapsado, rodeado por empresas particulares y complejos habitacionales”. “La lógica, el sentido común y el conocimiento sobre la gestión sustentable y sostenible de los RSU haría pensar en la clausura del actual relleno sanitario de la ciudad y su nuevo emplazamiento en un sitio como el seleccionado por el gobierno provincial. Pero el ego del intendente le impide pensar y razonar adecuadamente y, evidentemente, posee un pésimo asesoramiento”, advirtió Sambrín.

Le recordó que en enero de 2013 el ADI NQN, con aval de los municipios, llamó a una manifestación de interés para la construcción y explotación del proyecto Girsu, a la que se presentaron tres empresas, entre ellas la propia Cliba. La funcionaria afirmó que fue el intendente capitalino quien se negó a firmar el acta acuerdo, por lo que finalmente la iniciativa no avanzó. “Por negación del intendente Quiroga, al día de la fecha no se encuentra funcionando una planta de tratamiento y disposición final de RSU que hubiese tenido carácter integral y regional al incluir municipios de Neuquén y Río Negro”, concluyó.

Como el basurero de Quiroga, el proyecto Girsu también busca financiamiento del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

La Provincia impulsa clausurar el actual relleno sanitario porque está colapsado. Propone trasladarlo a otro lugar donde tiene reserva de tierras.“El complejo ambiental de la ciudad es uno de los tres mejores conceptuados del país y comenzó en el 2000”.El intendente Horacio Quiroga insiste en ponderar el reciclaje en la ciudad.

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