La UCR sostuvo que cinco de los trece pertenecieron a esa agrupación K. Ya hay dos detenidos por la Justicia.
La nómina de los imputados por la fiscalía es la siguiente: Federico Néstor Zerda, Jesús Moreno Martearena, Alejandro Sequeiro, Jorge Ariel Sequeiro, Cristian Mariano Llanes, Elías Angel Rodrigo Leguizamón, Angel Ezequiel Leguizamón, Oscar Sebastián Sequeiro, Walter Fernando Sagredo, Israel Salce, Juan Nicolás Ríos, Rodrigo Genaro Moruno, y Alejandro Ezequiel Sequeiro.
El fiscal de la causa, Aldo Lozano, ya logró detener a Jorge Ariel Sequeiro y Cristian Mariano Llanes, mientras la policía buscaba anoche a otros once presuntos integrantes del grupo que disparó.
Los incidentes del lunes abrieron una polémica en la provincia. Mientras la Tupac Amaru, miembro de Unidos y Organizados, denunció que fue “un intento de asesinato de Sala”, la UCR afirmó que, en realidad, fue “una pelea interna” de esa agrupación K.
El candidato a diputado nacional de la UCR, Mario Fiad, afirmó a Clarín que “la mayoría de los sospechosos son ex miembros de la Tupac. Los tres hermanos Sequeiro, además, eran los llamados “hijos del corazón de Milagro” en la primera etapa de la organización”. Mientras que voceros radicales agregaron que “Sagredo y Martearena son, también, ex militantes de la Tupac”. “Más aún a Alejandro Sequeiro, el año pasado, le quemaron el auto y la casa luego de que la Tupac le reclamó que le devuelva la vivienda en que vivía con su familia”, agregó Fiad.
Para el radical se trató de un “enfrentamiento interno. En el video firmado por la Tupac se ve que antes de los disparos había piedras en la calle ”. Es decir, luego de insultos e intercambio de piedras, un grupo fue a buscar armas de fuego.
Fiad criticó las declaraciones “apresuradas” del fiscal Lozano y pidió que “primero investigue y luego opine”. Recordó que Lozano estuvo vinculado, antes de ser fiscal, al sector político de Sala.
Voceros de la Tupac consultados por Clarín negaron que los sospechosos sean militantes de la agrupación que lidera Milagro Sala.
Dirigentes vinculados a Sala acusaron al senador radical Gerardo Morales y al dirigente municipal Carlos “Perro” Santillán como supuestos instigadores de la agresión. Morales dijo a este diario que “esa acusación es un disparate.
La UCR tiene una tradición de militancia política pacífica en la provincia y a nivel nacional.
Morales se solidarizó con los dos heridos de bala -uno continuaba ayer internado- y criticó “al entorno de Sala que siempre anda armado, como el Beto Cardozo y José Luis Bejarano”.
Mientras tanto, ayer continuaron los allanamientos en busca de armas de fuego y municiones de fabricación casera, que habrían sido utilizadas en el ataque. La causa está caratulada como “homicidio calificado en grado de tentativa y lesiones graves calificadas en concurso real”.
Sala recibió ayer al líder de Quebracho, Fernando Esteche, quien le manifestó su apoyo y advirtió “con la flaca no se jode”.
Comentá la nota