La Municipalidad de La Plata y la empresa recolectora de residuos Esur sumaron ayer una nueva polémica, luego de que el abogado Carlos Ortelli denunciara penalmente a la Comuna por arrojar desechos en un predio de Altos de San Lorenzo. 

Asombrado por la cantidad de bolsas de consorcio apiladas, además de las montañas de ramas y botellas que ya son parte del paisaje en la intersección de las calles 90 y 137, Ortelli se tomó el trabajo de registrar con su celular el desastre ambiental. Mientras grababa con su teléfono, un camión (al parecer, de la Comuna) se hizo presente en el lugar para verter sobre el terreno más residuos.

Con este material audiovisual y un escrito, el abogado se presentó en la Fiscalía nº 7 para denunciar “la posible comisión del delito de orden público, toda vez que las personas podrían ser empleadas por el estado municipal y/o ejecutando órdenes de algún fun­cionario público en desmedro del orden jurídico establecido”, al tiempo que advirtió el presunto incumplimiento de la ordenanza 10.661 Basura 0 y de la Ley 13.592 de la Provincia de Buenos Aires.

La acusación llega mientras se demora el llamado a licitación para que otras empresas reemplacen a Esur en sus deficientes tareas de recolección, pese a lo cual el Ejecutivo aún baraja prorrogarle a la prestataria del servicio un negociado que, solo en los primeros meses de 2017, superará los $500 millones. 

En diálogo con este medio, Ortelli aseguró que la situación es como “esconder la basura debajo de la alfombra”. Además, agregó: “Justo en la esquina del basural hay una cámara del Municipio. Esto da la pauta de que hay connivencia con la Secretaría de Seguridad. No puede ser que el ente encargado de velar para que no tiren mugre esté mirando para otro lado”.

Estas prácticas ilegales atentan contra el medioambiente y la salud de los vecinos que viven en las zonas aledañas a estos terrenos. Además, no parecen estar en sintonía con los más de $600 millones que el año pasado la Municipalidad pagó a Esur.

Cabe destacar que, a pesar de la fortuna recibida, la recolección  que brinda la empresa sigue siendo ineficiente. Por este motivo, la oposición en el Concejo Deliberante platense impulsó semanas atrás la creación de una Comisión Investigadora para indagar las presuntas irregularidades de un convenio que, según se sospecha, podría seguir esquilmando los bolsillos de los platenses sin que ello re­dunde en una ciudad más limpia.