"Es delicado entrar a una habitación y revisar los bolsos de alguien"

El presidente del Concejo municipal Ramón Chiocconi sostuvo que los padres de los egresados que tenían 98 botellas de bebidas alcohólicas en un hotel, tienen "una cuota de verdad en lo que plantean".

 

El presidente del Concejo municipal se sumó a la polémica que desató el control de inspectores de la Secretaría de Turismo a un hotel que albergaba egresados, a quienes le secuestraron 98 botellas de bebidas alcohólicas.

La fiscalización se realizó dentro de las habitaciones del hotel, en el momento en que los huéspedes se encontraban fuera del edificio. Acompañaron a los inspectores el gerente del hotel y el coordinador del grupo.

El modo en el que fue llevado a cabo el control disgustó a los tres padres del grupo, y uno de ellos, el juez platense Víctor Violini radicó una denuncia por allanamiento ilegal. 

La presentación judicial de los padres generó un gran rechazo por parte de los funcionarios municipales, y la misma intendente María Eugenia Martini calificó la actitud como "un papelón".

El presidente del Concejo Ramón Chiocconi pareciera no estar de acuerdo con la opinión de la mandataria y entendió que el control no habría sido legal.

En diálogo con El Vespertino de Radio Seis, el edil sostuvo que "hay una cuota de realidad o de verdad en lo que plantean los padres". "Es delicado entrar a una habitación y revisar los bolsos de alguien cuando esa persona no está presente, sin una orden judicial. Pero ese es el camino de la letra fría legal que hay que respetar y habrá que ver si esa ordenanza habilitaba o no a hacer eso" dijo.

La noticia hizo eco en todo el país, y tanto el juez Violini como el secretario de Turismo de Bariloche, Fabián Szewczuk realizaron declaraciones en medios de comunicación nacionales.

El presidente del Concejo se sumó al debate y agregó que "en el medio quedan atrapados los inspectores municipales que tienen que cumplir una ordenanza que está vigente y por otro lado el tema del alcohol que había en esas habitaciones, entonces también habían fallado ahí muchos controles porque ese alcohol ha sido adquirido en los quioscos de los alrededores o en un supermercado" dijo.

Además añadió que "por otro lado, está la cuestión cultural donde es normal y es natural emborracharse para divertirse, que evidentemente ahí la falla es más profunda". 

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