El STJ dejó cesante al juez de Paz de Pirané por “graves irregularidades”

El STJ dejó cesante al juez de Paz de Pirané por “graves irregularidades”

Por graves irregularidades detectadas en el marco de una investigación en un sumario administrativo, el Superior Tribunal de Justicia dejó cesante al juez de Paz subrogante de Pirané, el abogado Aldo Javier Samudio, quien transgredió con su conducta las reglas propias de sus funciones, aparejando la correspondiente responsabilidad administrativa prevista en el Reglamento Interno para la Administración de Justicia.

La cesantía decretada por el STJ al doctor Samudio se apoya en diversas y graves irregularidades cometidas en el ejercicio de sus funciones de juez subrogante de Pirané y como agente dependiente de dicha magistratura, condensadas en nueve imputaciones concretas por hechos que quedaron debidamente probados durante la investigación administrativa.

El STJ pudo constatar irregularidades que van desde el anómalo sistema de reemplazo de la magistrada titular y el grado de responsabilidad que en ello le cabía al agente Samudio, como así también el incumplimiento intencional de órdenes legales que perjudicaron material y moralmente a la Administración de Justicia.

El sumario administrativo dejó en evidencia la manera irregular de cubrir las inasistencias de la jueza Laura González -materializada con un simple llamado telefónico de la jueza avisando que no iba al Juzgado-, lo cual producía resultados perjudiciales, dado que automáticamente autorizaba a Samudio a comenzar a usar el sello y la firma de juez subrogante, trayendo aparejado confusiones y modos incorrectos de manejar los roles dentro del Juzgado. La confusión se trasladaba a las diligencias procesales, ya que aparecían actos con la firma de dos personas distintas como jueces de Pirané el mismo día.

También incurrió en infracción al deber de dedicación en lo que respecta a la buena conducta que debe primar en el servicio y fuera de él, y al deber de acatamiento al orden jurídico y político, como así la realización de comportamientos prohibidos por la reglamentación que comprometen la dignidad del cargo, implicando para él indignidad moral para continuar con las funciones como agente judicial por hacer uso personal de dineros entregados por justiciables y pertenecientes a expedientes en trámite en el Juzgado de Paz.

Sobre este último punto, quedó probado que el agente Samudio manejaba en forma discrecional dineros ajenos, utilizando las sumas depositadas y que correspondían a causas en trámite, cubriendo el faltante cuando los beneficiarios acudían al Juzgado a cobrar, incurriendo de esta forma en la infracción al deber de dedicación en lo que respecta a la buena conducta que debe primar en el servicio y fuera de él y al deber de acatamiento al orden jurídico y político, además de realizar comportamientos prohibidos por la reglamentación.

Litigaba

Otra de las imputaciones que luego quedó probada a lo largo de la investigación tiene que ver con el ejercicio de la profesión de abogado que desplegaba Samudio, pese a tener vedada esta actividad por ser integrante del Poder Judicial y percibir el adicional por dedicación exclusiva.

Asimismo, también quedó demostrado a partir de numerosos testimonios que en días y horarios de servicio, Samudio se movilizaba desde la ciudad de Pirané hasta la localidad de El Colorado para revisar, presentar y retirar escritos en expedientes personales de la por entonces titular del Juzgado, la abogada Laura Elvira González, descuidando sus labores judiciales.

Del mismo modo, se comprobó que incurrió en mal desempeño de sus funciones en la tramitación de expedientes y también malos tratos contra personas que realizaban diligencias en el Juzgado.

A tenor del material probatorio debidamente incorporado en el sumario administrativo y la recta evaluación hecha sobre los mismos y del grado de participación que le cupo en ellos al agente Samudio, el STJ llegó a la conclusión que el sumariado incurrió en una clara transgresión a varios artículos establecidos en el RIAJ, tales como los que aluden al deber de dedicación, deber de respeto, consideración y conducta, deberes de obediencia jerárquica y de acatamiento al orden jurídico-político. Asimismo, cometió actos prohibidos por la reglamentación, al litigar en forma privada como profesional de la abogacía.

En paralelo a este sumario administrativo, se está instruyendo en el Juzgado de Instrucción y Correccional N° 2 una investigación penal ante la posibilidad de que los hechos denunciados constituyan delitos penales.

En virtud de esto, una copia certificada de la cesantía aplicada a Samudio fue remitida a dicho Juzgado Penal.

Nuevo juez en Pirané

El sumario administrativo que derivó en la cesantía de Samudio, también tiene como imputada a la extitular del mismo Juzgado de Paz, la doctora Laura Elvira González, respecto de la cual aún no se ha emitido una resolución definitiva, encontrándose las actuaciones en etapa de investigación.

En virtud de esto, el Superior Tribunal decidió no renovarle el contrato como jueza de Paz, al considerar que las graves irregularidades que le imputan no hacen viable la continuidad en dicho cargo, razón por la cual la profesional volvió a su cargo de planta como empleada administrativa del Poder Judicial, sin perjuicio de la prosecución de la investigación administrativa y penal.

Al quedar vacante este cargo, el STJ resolvió -a través de la Acordada 2888, punto 16- designar a partir del próximo 1 de junio como nuevo juez de Paz de Pirané al doctor Néstor Luis Dellagnolo, quien venía desempeñándose como juez de Paz de Palo Santo.

Cabe aclarar que al producirse la vacancia en Pirané por la renovación de contrato de su titular, el doctor Dellagnolo solicitó su traslado a dicha magistratura, pedido que fue aceptado por el Superior Tribunal en la reunión de acuerdos del pasado 18 de este mes.

En la misma resolución, el STJ facultó a Presidencia a convocar al concurso para cubrir el cargo de juez de Paz de Palo Santo, que quedará vacante a partir del próximo mes.

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