La DEIE sale a medir la pobreza en 7.000 hogares mendocinos

La DEIE sale a medir la pobreza en 7.000 hogares mendocinos

La muestra es 10 veces mayor que la del INDEC, e incluye zonas rurales y urbanas. Cuesta $2 millones y durará hasta noviembre

La dirección de Estadísticas e Investigaciones Económicas de Mendoza (DEIE) está realizando la encuesta de condiciones de vida para medir exactamente cuántos mendocinos son pobres y qué características tiene esa pobreza. La medición se retoma luego de cuatro años de ser abandonada por falta de presupuesto y tiene características muy distintas a la que ofreció el INDEC, en agosto último, sobre la Encuesta Permanente de Hogares. 

En el caso mendocino, serán tomadas 7.000 viviendas de zonas urbanas y rurales, para tener una visión más completa de lo que sucede en la provincia, ya que la EPH sólo toma 800 casos del Gran Mendoza.

Durante todo este mes y parte de noviembre, más de 200 personas recorrerán los barrios portando identificación y un número de teléfono para consultar si se tiene alguna duda sobre el motivo de la visita del encuestador. La Policía y los municipios cuentan con un listado de los encargados de relevar los datos en territorio para mayor seguridad de la ciudadanía. 

Facundo Biffi, titular de la DEIE, indicó que "el hecho de que estemos haciendo la encuesta ya es un avance enorme porque solo Mendoza y Ciudad Autónoma están haciendo mediciones, el resto de las provincias se queda con lo que hace el INDEC en zonas urbanas. Pero además vamos a poder conocer las características de las condiciones de vida, cómo es el contexto de la vivienda donde vive la persona, a cuánto tiene de su casa un centro de salud o una comisaría, lo que luego debería servir para observar patrones que les ayuden a tomar decisiones a las autoridades". Por supuesto que el cuestionario tendrá preguntas sobre el tipo de vivienda, como por ejemplo, si tiene o no techo de material, si tiene divisiones entre cocina y las habitaciones, así como las habituales consultas sobre cantidad de personas convivientes, edad, empleo, nivel de estudio, acceso a agua potable, cloacas, transporte, servicios educativos, etcétera. En este contexto, están en pleno debate los parámetros que deben ser tomados en cuenta para considerar la pobreza, porque ya no se trata sólo de las preguntas más tradicionales de la EPH, sino también consultas sobre niveles de inseguridad, violencia intrafamiliar, acceso a internet, a entretenimiento o vacaciones, es decir, medirla de manera multidimensional. A este debate no se ha sumado formalmente la DEIE, pero dentro de las 120 preguntas que deben contestar los mendocinos muchas tienen que ver con este nuevo parámetro para decir si alguien es o no pobre, por fuera de su nivel de ingresos. 

En total, la DEIE gastará $2 millones para el proceso, que tendrá un mes y medio de trabajo de campo, y otro mes más para el procesamiento de datos, con lo cual recién a mediados de diciembre se sabrá el porcentaje de la población mendocina que es pobre.

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