Tal como lo anticipó Diario Patagónico, se conoció ayer el veredicto de responsabilidad en el marco del juicio oral y público al que fue sometido Roque Sartor, el hombre que reiteró su comportamiento violento contra su ex pareja.

En la parte resolutiva de la sentencia, la juez penal Raquel Tassello hizo lugar al pedido del Ministerio Público Fiscal, el cual a través del fiscal general Héctor Iturrioz solicitó que se lo declare penalmente responsable del delito de privación ilegítima de la libertad y amenazas agravadas por el vínculo, además de violación de domicilio. En consecuencia, lo declaró culpable y ahora habrá que discutir el monto de la pena.

Al respecto, el acusador público ya adelantó que su pretensión punitiva es de 4 años de prisión y que ese será el monto que reclamará en el juicio de cesura, el cual se desarrollará en el transcurso de esta semana.

 

UN HOMBRE VIOLENTO

A principios del año pasado, Sartor fue denunciado de interceptar a su ex pareja en la plaza Scalabrini Ortíz y llevarla hasta el cerro Chenque bajo la amenaza de un revólver calibre 38.

La policía fue alertada a tiempo y se le incautó el arma. Por ese delito, el hombre cumplió 40 días de prisión preventiva, pero recuperó la libertad y en mayo se le dictó una prohibición de acercamiento al domicilio de su ex esposa, algo que incumplió, ya que en la noche del 20 de agosto volvió a ser detenido por personal policial de la Seccional Primera y la Fiscalía le abrió una investigación por privación ilegítima de la libertad y amenazas agravadas por el vínculo, además de violación de domicilio.

En esa oportunidad, Sartor fue sorprendido por la policía mientras tenía reducida con precintos a su ex pareja. Además, al momento de llegar los uniformados tenía en sus manos un trozo de hierro envuelto en celofán.

Según la denuncia, la víctima había salido con la mayor de sus hijas y la más pequeña quedó al cuidado de una vecina. Al regresar a su vivienda, la mujer encontró a Sartor en su habitación y éste rápidamente la redujo, atándola de pies y manos con precintos, todo lo cual realizó frente a la niña.

La policía fue alertada por una vecina y llegó a tiempo para poder reducirlo, a partir de lo cual quedó detenido y pasó todo el proceso cumpliendo medida de coerción, aunque hace unos meses se lo benefició con arresto domiciliario. Sin embargo, en el caso de aplicarle los 4 años la condena será de cumplimiento efectivo.