Cuando iniciamos la gestión en el 2003, las políticas sociales eran precarias y presentaban problemas de carácter casi constitutivo, incluso eran planteadas como gasto social y no como inversión social. Hoy afirmamos que vivimos en una Década Ganada sobre los noventa que fue la síntesis de una década perdida donde cientos y cientos de argentinos fueron invisibilizados del tejido social.

Niños que murieron por desnutrición y otros que viven hoy con profundas secuelas de discapacidad como consecuencia de aquella época. La tasa de mortalidad infantil en el año 1992 era de 23,9 por mil y actualmente consolidada al 2012 es del 11,2 por mil. Muchos de los niños y adolescentes que hoy reciben una pensión por invalidez, son víctimas de aquella década perdida. Hoy, para asegurar el desarrollo y la inclusión social hemos incorporado la Asignación Universal por Hijo y la Asignación para mujeres embarazadas.

Esta década en políticas sociales estuvo marcada por el cambio de paradigma. Donde la mirada se colocó en los derechos, en la invención de nuevas herramientas y técnicas, en el abordaje integral, intersectorial y territorial. Todo esto en el marco de un proyecto nacional, popular y democrático que construye identidad colectiva.

La contundencia de lo ganado se refleja en la reducción de la pobreza estructural y en el crecimiento de los sectores medios, y se evidencia en el coeficiente de Gini, unos de los indicadores más utilizados para medir desigualdad. En estos 10 años, se ha quebrado su tendencia ascendente y acumula una caída de 0,1 puntos (de 0,53 a 0,43). Asimismo, si hacemos una comparación de los censos 2001-2010 respecto del índice de necesidades insatisfechas de las personas hay un descenso del 17,2% al 12,5% lo que equivale a 4.956.711 personas que salieron de la pobreza estructural.

Hoy nos encontramos con una sociedad que se transformó y continuará transformándose cualitativamente. Con políticas sociales transversales progresamos en la justa distribución del ingreso, y su consecuente movilidad social ascendente construyendo mayor igualdad, con inclusión permanente de poblaciones aún vulnerables porque seguimos trabajando en todo lo que todavía falta.

Agregamos valor con la formación en oficios, la terminalidad educativa y las diplomaturas, haciendo eje en el trabajo cooperativo como mejor organizador social. Articulamos saberes populares y técnicos en acciones. Profundizamos las herramientas de protección y promoción y seguimos implementando líneas de acción específicas para desigualdades vinculadas a la condición de género, etnia, y etaria - niños, jóvenes y adultos mayores - .

En estos 10 años hemos reconquistado derechos humanos y sociales que nos fueron cercenados durante las últimas décadas. Hemos reconstruido con más fuerza que nunca el tejido social lo que nos va a permitir no volver atrás, lo hicimos con la fortaleza que nos da la Memoria, con la liberación que nos da la Verdad y la convicción que nos da la realidad efectiva de inclusión y Justicia social.

Cuando asumió la presidencia Néstor Kirchner, lo hizo con más desocupados que votos, pero con fuerza y convicción sacó a la Argentina del infierno e inició un camino de reconstrucción que hoy defiende y profundiza con coraje nuestra Presidenta, Cristina Fernández de Kirchner.

Ampliamos derechos al calor de la alegría de un pueblo que nuevamente fue y es protagonista de su historia. Esta Década Ganada se constituye así, en términos históricos, como la Bisagra de un País de todos y para todos.