El debut en Barrios Limpios

A partir de la inauguración en la planta de reciclado en el predio de disposición final de los residuos, una nueva etapa se abrió en la vida de las familias que vivían de lo que juntaban en el ex basural.

En un informe presentado por La Voz del Pueblo se planteó la dificultad social, como consecuencia de la apertura de la planta y el cambio en el sistema de trabajo en el mencionado predio.

Más de 30 hombres y mujeres pasaron por tiempos de zozobra. Una parte de ellos pudieron ser parte de la cooperativa de trabajo, que bajo la supervisión de Transportes Malvinas empezó a funcionar ese mismo día, una vez que se cortaron las cintas que inauguraban el lugar. La situación fue adversa para todos aquellos que no ingresaron a la planta de reciclado. Sólo la intervención conjunta, en equipo, del secretario de Desarrollo Social, Francisco Aramberri, del presidente del Concejo Deliberante, Luis Aramberri y del concejal, Julio Federico, pudieron destrabar la situación.

De esta manera, se logró que los restantes trabajadores fueran incorporados al programa Barrios Limpios. La Voz del Pueblo habló con todos los protagonistas, los jóvenes Emanuel Guzmán y Daniel Mesa que dieron su testimonio el día que iniciaban sus tareas en la planta, mientras que David Campos, junto a Perico Espinosa, hacían lo propio ante la propuesta de formar parte de las cuadrillas que limpian los barrios.

Todos manifestaron el deseo de tener un trabajo formal, la ilusión de poder hacer tareas "limpias", sin meter la mano en la basura, y la esperanza de ya no tener que comer de ella.

Ayer fue el día esperado, que vino a saldar la deuda que la sociedad tiene con los más necesitados. A la hora programada, todos los convocados se reunieron en la Secretaría de Desarrollo Social para recibir las instrucciones del caso y partir hacia el destino asignado en su primer día de trabajo formal.  Hacía ocho días que les habían entregado la ropa y calzado reglamentario para la realización de la tarea. Todos se presentaron prestos a iniciar la jornada laboral. Una vez que acordaron estrategias de trabajo, se subieron a una camioneta dispuesta por el municipio y salieron rumbo a la avenida Güemes, entre Alem y Libertad. Desde la Secretaría se escuchó decir que se veían "como niños, contentos y entusiasmados". 

El grupo cumplirá tareas desde las 13 hasta las 17 horas y lo harán en una cuadrilla organizada por ellos mismos, con la coordinación de un empleado del área que dirige Roberto Pissani.

El concejal Julio Federico estuvo presente acompañando el primer día de trabajo de los que tanto lucharon para salir de la "basura". Habló con los trabajadores, definiendo el momento como de enorme responsabilidad y algarabía. Señaló que "los vi bien, contentos, con su ropa de trabajo, comprometidos en lo que hacen y lo más importante, incorporados al trabajo formal".

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