El kirchnerismo logró eludir ayer el primer intento de la oposición de obligar al oficialismo a tomar una decisión sobre la permanencia de Carlos Menem (PJ-La Rioja) en el Senado luego de que se conociera el fallo de la Cámara de Casación que lo condenó en la causa por contrabando de armas a Ecuador y Croacia.

El radicalismo aprovechó la sesión de ayer para recordar que su bloque había presentado un proyecto de resolución para que una comisión reglamentaria analizara la situación de Menem, a lo que el oficialismo replicó que la iniciativa ya había sido girada a la Comisión de Asuntos Constitucionales, que tiene previsto reunirse en la primera semana de abril.

Esa comisión, que tiene amplia mayoría oficialista y que también integra Menem, también tendrá que analizar otro proyecto, presentado por el FAP, que pide la expulsión del ex presidente del cuerpo, en virtud de la "inhabilidad moral sobreviniente" a la asunción de su banca por La Rioja que implica el hecho de que haya sido condenado por la Justicia.

Si bien el debate se saldó rápidamente y sin demasiados sobresaltos, la presión ejercida desde el radicalismo y desde el FAP prendió las luces de alerta en el tablero de comando del bloque oficialista, que tarde o temprano tendrá que resolver qué camino seguir con quien es un aliado táctico en las votaciones más importantes para la Casa Rosada.

Al respecto, fuentes del bloque oficialista confiaron ayer a LA NACION que la decisión la tendrá la presidenta Cristina Kirchner, y que por el momento no han llegado señales sobre la política a seguir con Menem.

Pero la situación podría comprometerse si a los pedidos de la oposición, que apuntan a expulsar al riojano del Senado, se suma un pedido de desafuero de la Justicia para aplicarle o hacer efectiva la condena.

El delito por el que fue castigado Menem en el caso armas tiene una pena mínima de cuatro años, es decir, de cumplimiento efectivo, razón por la cual la Cámara alta tendría que quitarle la inmunidad de arresto que el ex presidente posee hoy en su condición de legislador nacional.

Al contrario de lo que se puede creer, el peor camino para el kirchnerismo no sería la exclusión de Menem del cuerpo, ya que su expulsión permitiría asumir la banca a su suplente -el ex presidente renovó su banca en 2011-, quien le garantizaría al oficialismo el mantenimiento de un voto clave en momentos difíciles.

En el oficialismo admiten que el peor escenario para la Casa Rosada sería la suspensión del riojano, caso en el cual perdería ese voto, ya que su escaño no podría ser ocupado por otro legislador hasta su exclusión del cuerpo o una eventual renuncia.

Fue condenado y espera sentencia

Carlos Menem fue condenado por la Justicia por el contrabando de armas a Ecuador y Croacia. La Cámara de Casación revocó la absolución que había beneficiado al ex presidente. Los jueces enviaron de nuevo el caso al Tribunal Oral en lo Penal Económico N° 3 para que determinen el monto de la condena. Menem apeló y el asunto será dirimido a la postre por la Corte. Para cumplir la pena, el Senado debe quitarle los fueros. Su edad permite el arresto domiciliario.

Mientras tanto, espera ser juzgado acusado de encubrimiento en la causa AMIA y tiene otro proceso abierto en el que está acusado de no declarar una supuesta cuenta en Suiza..