El municipio se abstuvo de emitir una opinión sobre la posibilidad de crear un centro comercial a cielo abierto.

El centro comercial a cielo abierto es una forma de cooperación comercial que se lleva a cabo en un área en el cual se desarrollan actividades comerciales, de servicios y recreación. Permite enfrentar las dificultades que posee el comercio minorista, como por ejemplo acciones de promoción, distribución, seguridad y marketing o financiamiento.

Así se presenta la iniciativa de la Federación de Comercio e Industria que desde hace tiempo viene analizando entres sus asociados.

Se trata de una versión mejorada de la pretendida peatonalización de las calles céntricas de la ciudad y que el municipio ha implementado con distintas variantes de manera experimental.

El concepto urbano de centro comercial a cielo abierto tiene más aspectos que los presentados cuando se discute si Nación y Mitre tienen que ser peatonales, o cambiar de sentido para agilizar el tránsito.

El avance de la obra pública preponderando la presencia del peatón da una muestra de un cambio de paradigma. La Plazoleta Francisco, la ampliación de la vereda del bar histórico de Mitre y Sarmiento son parte de esa idea. Más adelante la esquina del Teatro Municipal será alcanzada por esa nueva distribución de los espacios.

Mientras tanto la repavimentación de calle Pellegrini apura la necesidad de determinar cuál será el futuro de las calles Mitre y Nación, entre Chacabuco y Sarmiento. Por eso la Federación de Comercio e Industria convocará a debatir y consensuar esos criterios.

Expertos en urbanismo de reconocidas instituciones académicas harán su aporte a la cuestión.

Se estima que en el corto plazo se darán a conocer las dinámicas para que la gente pueda opinar y los sectores interesados expedirse sobre una amplia zona comercial, no para esta circunstancia temporal, sino con un plan de desarrollo que sea sostenido en el tiempo.

Es claro también que se deberán esclarecer algunas cuestiones que ya no pueden discutirse, como por ejemplo el destino de las calles adoquinadas, la utilización de los corredores viales, la adecuación del estacionamiento medido, los límites de los anuncios en la vía pública, el impacto de la contaminación visual, sólo por citar algunas.

Del debate serio, de la responsabilidad hacia las futuras generaciones, puede surgir un proyecto interesante. Y además una mecánica de discusión de las cuestiones de los nicoleños, que permita definir que perfil puede llegar a ser distintivo de San Nicolás.