El secretario Gremial del sindicato de guincheros asumió la semana pasada su cargo. Su prioridad será preservar el empleo. Mantendrá su banca de concejal, pero no cobrará la dieta. Desde la semana pasada, el secretario Gremial del Sindicato de Guincheros y Grúas Móviles Daniel Lewicki es el nuevo titular de la delegación Avellaneda del Ministerio de Trabajo de la provincia de Buenos Aires. El dirigente gremial y actual concejal del bloque Cambiemos fue confirmado en su cargo por el gobierno provincial, que así completa la vacante surgida luego del recambio de diciembre.
Lewicki afirmó que el nombramiento “es todo un desafío”, y recordó que en su gremio viene haciendo tareas similares a las que le tocarán en la delegación. “La tarea es conciliar, llegar a acuerdos con empresas, que los trabajadores tengan su convenio colectivo de trabajo, que se les pague lo que corresponde”, remarcó Lewicki al programa radial Política del Sur (AM 1470).
Para el dirigente, el gran objetivo de su gestión será “que no haya despidos”. “Es una época complicada, pero las empresas en Avellaneda se quieren poner a la altura, les pedí un poco de paciencia, no es lindo quedarse sin trabajo, por eso digo que hay que capacitar al personal, mantenerlos con buenos salarios y sostener las fuentes de trabajo”, destacó Lewicki, quien en una de sus primeras intervenciones como delegado laboral se reunión con los representantes de la Unión Industrial Argentina (UIA) de Avellaneda, para que conozcan los lineamientos de su gestión, a partir del pedido del propio Ministerio provincial, que conduce Marcelo Villegas.
Sobre su banca en el Concejo Deliberante de Avellaneda –es parte del bloque de Cambiemos – Lewicki aseguró que mantendrá las dos ocupaciones. “Lo que tengo que hacer es renunciar a la dieta de la concejalía, y así puedo ejercer los dos cargos a la vez”, explicó. En este sentido, adelantó que ya envió una carta pidiendo este paso, para terminar el camino legal que se requiere para esta doble función.
Además, Lewicki ponderó el proyecto que busca declarar la emergencia ocupacional, y así suspender los despidos por un año como mínimo. “Son medidas buenas, hay empresarios de todo tipo, algunos que la pasan mal por algunos inconvenientes y otros que aprovechan los momentos para dejar gente a la calle. Si son medidas para hacer que este sea un momento de transición y los trabajadores conserven su fuente laboral, por supuesto que son buenas”, dijo.
“Por el momento en Avellaneda hay muy poca pérdida de trabajo, según me dicen los propios empresarios. Parece que no estamos en una mala situación, lo que si tendríamos que levantar un poco el volumen de trabajo que está bastante caído, en el sector portuario de donde vengo yo estamos muy bajos, el comercio exterior está en un 50 por ciento por debajo de lo que trabajábamos en 2008”, concluyó el flamante delegado laboral.
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