El Concejo Municipal realizará hoy la segunda sesión extraordinaria del año, bajo condiciones especiales de seguridad, para dar inicio al proceso de revocatoria de mandato del intendente Omar Goye. El pedido fue formalizado ayer en un proyecto suscripto, en principio, por los ediles del Frente Grande y el PVC.

El texto final, evaluado y afinado durante más de tres horas por diez de los once integrantes del cuerpo, contempla siete causales de revocatoria y dispone la suspensión inmediata de Goye en sus funciones (ver aparte).

La extensa deliberación no estuvo exenta de tensiones ya que los concejales del FpV, el FG y el PVC recibieron amenazas personales graves, por teléfono y mensajes de texto, a la par de agresiones e insultos anónimos y la contraofensiva de Goye pidiendo la revisión de sus mandatos.

Finalmente, el proyecto de ordenanza 278 ingresó a la mesa de Entradas pasadas las 16.

En un segundo intento de contragolpe, el intendente se anticipó a la iniciativa planteada contra su gestión y pidió la apertura formal del proceso de revocatoria para 7 concejales, integrantes de los bloques del FpV, el FG y el PVC. En todos los casos invocó el incumplimiento de los pasos legales en el apartamiento del defensor del Pueblo, Vicente Mazzaglia.

En las consideraciones particulares, Goye pidió la remoción de la presidente del cuerpo María Eugenia Martini y de los oficialistas Alejandro Ramos Mejía y Ramón Chiocconi por incumplimiento de la plataforma electoral y por haber obstaculizado la aprobación de la tasa al Turismo. Similares argumentos esgrimió en el caso de Mauro González (PVC), al que recordó la incompatibilidad de su pertenencia a una cooperativa. Por último, a Carlos Valeri, Alfredo Martín y Diego Benítez (FG) les endilgó el incumplimiento de la ley de cupo femenino al asumir sus funciones, entre otras causales.

El proyecto de los concejales tiene 23 páginas de fundamentos y antecedentes, y el acompañamiento de una significativa mayoría cuyos nombres se mantuvieron en reserva para evitar nuevas presiones y amenazas. En cambio se supo que los concejales de Pueblo no suscribieron la iniciativa pero Carmen Giménez anticipó que acompañará el pedido y se estima que Leandro Lezcano seguiría sus pasos.

La sesión extraordinaria de hoy prevé medidas de seguridad especiales por el grado de agresión reflejado en las amenazas y pintadas que circularon mientras los concejales daban las puntadas finales al proyecto.

De hecho se resolvió que la sesión sea a puertas cerradas pese a que el secretario Privado, Oscar Borchichi, anticipó la decisión de pedir que se garantice el acceso a todo público. El funcionario, que ayer concurrió varias veces a la sede del Deliberante para seguir de cerca la definición del demorado proyecto, advirtió que "esto es una batalla y la vamos a dar hasta el final".