La presidenta Cristina Fernández de Kirchner pidió a Córdoba sumarse al “proyecto nacional que le cambió la vida a los argentinos” para que “vuelva a ser lo que alguna vez fue”, en referencia a los hitos históricos de la provincia, como la Reforma Universitaria y el Cordobazo, y dijo que quiere que la provincia “vuelva a generar historia”. Lo afirmó en el acto central por los 400 años de la Universidad Nacional de Córdoba, que se realizó ayer en el Pabellón Argentina, donde la mandataria dedicó parte de su mensaje a ratificar -elipsis mediante- la necesidad una reforma judicial que permita la elección popular de los integrantes del Consejo de la Magistratura, ley que anteayer la Corte Suprema de Justicia declaró inconstitucional.

En ese tema, Cristina de Kirchner comparó el reclamo de libertad y de democratización de la Universidad de los reformistas de 1918, con el proyecto oficialista que impulsa la elección popular de quienes eligen y remueven a los jueces de la Nación. “Córdoba se redime. Desde ahora tenemos una vergüenza menos y una libertad más”, dijo, leyendo el inicio del Manifiesto Liminar de la Reforma, que redactó Deodoro Roca. “Vergüenza debieran tener quienes nos quieren recortar libertades que nos faltan”, afirmó, el obvia alusión a los jueces de la Corte. “Los dolores que nos quedan son las libertades que nos faltan”, continuó con Manifiesto y acotó, en lo que podría leerse como el anuncio de un nuevo intento legislativo a futuro: “Ayer nos dieron un dolor. Pero nos vamos a curar porque tenemos buenos remedios, inyecciones y antibióticos, enfermeras y médicos”.

Con un discurso que bordeó siempre la Reforma Universitaria y la Reforma Judicial, Cristina apuntó a “aquellos que pretenden para reformas con una resolución, y no dejar votar al pueblo” y a “aquellos que creen que pueden impedir el avance de la democratización”. Y de nuevo, la advertencia: “Sepan que no van a poder hacerlo por mucho tiempo”. “Más temprano que tarde, los argentinos van a poder votar democráticamente a todos los organismos políticos de la Constitución”, aseguró, tras afirmar: “Vamos a dar más batallas”.

Presencias y ausencias

El acto central por el aniversario 400º de la UNC comenzó pasadas las 18, ante una multitud calculada en 25 mil personas que se concentró delante del escenario montado sobre la explanada del Pabellón Argentina, y sobre la avenida Enrique Barros. La mandataria llegó al Aeropuerto Córdoba, donde la recibió el gobernador José Manuel de la Sota (ver aparte). Ya en la Ciudad Universitaria, el primer discurso estuvo a cargo del rector de la Casa de Trejo, Francisco Tamarit, que remarcó la necesidad de que la educación superior llegue a los sectores más pobres de la sociedad (ver aparte). Luego, previo al discurso de CFK, se exhibió un video realizado por Presidencia de la Nación, donde se resaltó la inversión realizada por el estado nacional en las universidades públicas del país, y el crecimiento de la matrícula y el nivel de egreso en los últimos diez años, entre otros puntos.

Sin De la Sota, la Provincia estuvo representada por la vicegobernadora Alicia Pregno, quien se mostró seria durante el festejo y en general no aplaudió a la Presidenta. La vice no fue ubicada en la mesa principal, donde estaban Cristina y Tamarit, pero sí el intendente de la Ciudad, Ramón Mestre. También estuvieron allí el ministro de Educación de la Nación, Alberto Sileoni, y el ministro de Planificación, Julio De Vido.

Arriba del escenario, pero en otra mesa, se sentó Pregno junto al resto de la autoridades y los rectores invitados.

Abajo, en la “platea”, se ubicó un variopinto conjunto de dirigentes políticos que fue de la concejala Olga Riutort al viceintendente Marcelo Cossar. También se vieron varios intendentes de Córdoba, entre ellos, el villamariense Eduardo Accastello, los de Viamonte, Gabriel Fernández, Villa Dolores y Juan Pereyra, entre otros. Detrás, las columnas de las distintas organizaciones políticas que integran el colectivo Unidos y Organizados, y de las agrupaciones estudiantiles afines al kirchnerismo, como La Bisagra. La militancia K cantó consignas a favor de la Presidenta y de la Universidad pública y del ex presidente Juan Perón como responsable de la gratuidad de la enseñanza superior. Un poco más lejos, lejos, un centenar de militantes del MST y de la agrupación ecologista Malvinas Lucha por la Vida, hacían escuchar cánticos contrarios a la mandataria y sus políticas.

El inicio del evento estuvo marcado por una festiva versión del Himno Nacional Argentino, interpretado por el grupo Choque Urbano y la Fanfarria Militar Alto Perú. El cierre estuvo a cargo del cantautor Fito Páez, junto a la Orquesta Sinfónica Juvenil.