“Eso se llama empezar a mover el piso” , fue la irónica frase que Amado Boudou le dedicó a Beatriz Rojkés de Alperovich, quien lo sigue en la línea sucesoria de la Presidenta, mientras dirigía en el Senado un tenso debate sobre el caso Ciccone, que lo involucra. La senadora tucumana acababa de cometer el “blooper” de votar junto a la oposición a favor de crear una comisión investigadora, bloqueada finalmente por la mayoría K.

Ahora, por un asunto que para nada es jocoso, a la que le quieren mover el piso es a la propia esposa del gobernador de Tucumán. Los senadores opositores ya hicieron saber que no están dispuestos a avalar la continuidad de Rojkés de Alperovich como presidenta provisional de la Cámara por haber declarado que “la prostitución existe y existirá siempre” mientras arreciaban las expresiones de repudio a la absolución de todos los acusados por trata de personas en el caso Marita Verón, tramitado por tribunales tucumanos.

La renovación anual de autoridades en el Senado se realizará recién el 24 de febrero, pero en el despacho de José Cano, el tucumano que asumirá la presidencia del bloque radical en unos días, ya hicieron circular la negativa a seguir la tradición de votar al candidato que el Gobierno proponga para el cargo. La primera en instalar el tema fue la flamante titular de la Convención Nacional de esa fuerza. Lilia Puig de Stubrin dijo el jueves, en un encuentro femenino del partido, que “las mujeres radicales vamos a reclamar que la senadora Rojkés se retire de la línea sucesoria presidencial ”.

Aunque el kirchnerismo tendría los votos suficientes –con ayuda de aliados– para asegurar la reelección de Rojkés, entre las autoridades del bloque también comenzaron a circular rumores sobre un eventual desplazamiento de la tucumana, para evitar que la amplificación del traspié de la senadora en un tema tan sensible durante la sesión preparatoria de febrero le provoque al oficialismo un alto costo político .

Esa versión indica que en la Rosada ya se habría abordado el tema y que Miguel Pichetto, jefe histórico del bloque de senadores oficialistas, sería el reemplazante de Rojkés en la presidencia provisional, mientras que Aníbal Fernández se haría cargo de la bancada .

En la intimidad de Olivos, Cristina habría comentado su arrepentimiento por haber nombrado a Rojkés para que una mujer ocupe por primera vez el cargo en la Cámara alta. La senadora también había tenido que pedir perdón por calificar de “familia borracha” a un matrimonio tucumano a la que le habían asesinado a una hija de 6 años. Fue en mayo, diez días ante de haber ejercido por 24 horas la Presidencia de la Nación en ausencia de Cristina y Boudou.