Conviene otra vez usar tarjeta en el exterior

La suba acumulada del 8,5% del dólar en el mercado informal en apenas cinco jornadas hábiles de 2014 volvió a cambiar la ecuación para los que viajan al exterior por turismo.
El recargo adicional para los gastos con tarjeta y la suba del tipo de cambio oficial encarecieron notoriamente la ecuación para quienes viajen al exterior. Sin embargo, ahora vuelve a ser muy conveniente gastar con tarjeta para pagar al tipo de cambio oficial más el 35%, ya que el descuento en relación con el dólar en las cuevas vuelve a ser destacado.

Según el cierre de ayer, el "dólar tarjeta" cerró en $ 8,92, que es el tipo de cambio estimativo que se aplicaría a un resumen de tarjeta que cerró ayer por los gastos efectuados con el plástico fuera de la Argentina. Como al mismo tiempo el paralelo subió ayer hasta $ 10,90, significa que el descuento por utilizar plástico para comprar fuera de la Argentina es del 18%. Puesto de otro modo, el "blue" está 22% más caro que el tipo de cambio que se aplica para las compras con una tarjeta de crédito o para extraer billetes desde un cajero automático en el exterior.

Cuando se definió el recargo, la diferencia entre el dólar-tarjeta y el que se ofrece en las cuevas se había achicado a menos del 10%. La intención era que prácticamente desapareciera la brecha entre ambos para desincentivar el gasto con tarjeta de crédito en el exterior, que es uno de los canales más fluidos de salida de divisas. En 2013, sin ir más lejos, el balance cambiario del turismo fue negativo en más de u$s 8.000 millones.

En las últimas dos o tres semanas, las estadísticas del Central comenzaron a mostrar una baja en el uso de la tarjeta en dólares. Sin embargo, aún luce prematuro deducir con claridad si se produjo un "efecto desaliento" en el uso del plástico. En realidad, todo indica que aquellos que ya tienen programado el viaje fuera de la Argentina en buena parte seguirán optando por esta alternativa que les permite pagar en pesos antes que hacerlo con billetes dólar.

En la medida en que la brecha entre ambos tipos de cambio tiende a desaparecer, para muchos viajeros es preferible pagar en dólares "cash" para no dejar tantas huellas relacionadas con el consumo en el exterior. De hecho, la AFIP trabaja activamente para detectar gastos excesivos en los viajes que no se corresponden con las declaraciones de ingresos del individuo o del grupo familiar.

Claro que cuando esa diferencia se va volviendo más importante, reaparece el incentivo de usar el plástico. Concretamente, para un gasto de 10.000 dólares en el exterior, habría que pagar el resumen de tarjeta por 92.000 pesos. Pero los dólares necesarios para obtener esos pesos en el mercado local ascienden a alrededor de 8.440, lo que significa un atractivo ahorro en relación con lo que se podría haber gastado comprando "cash" fuera de la Argentina.

Por eso, más importante que encarecer el "dólar tarjeta" es conseguir que la brecha con el oficial disminuya, en vez de que se agrande. Sólo en las próximas semanas estará claro si hay chances de que ambos tipos de cambio confluyan o, por el contrario, esta distancia continúa aumentando.

Para los inversores más sofisticados hay otra posibilidad, que va más allá de comprar billetes en el paralelo o usar la tarjeta en el exterior, que es acceder a divisas a través de la operatoria conocida como "dólar Bolsa". Se trata de la compra con pesos de bonos dolarizados, que luego se canjean por el mismo título pero con serie "D", tras lo cual se depositan los dólares en la caja de ahorro, los cuales pueden ser retirados inmediatamente. Aunque en las últimas jornadas el tipo de cambio relacionado con esta transacción aumentó por encima de $ 9, se mantiene el atractivo en comparación con la cotización del informal.

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