Control de evasores: la Provincia busca formalizar la economía para bajar la presión tributaria

Control de evasores: la Provincia busca formalizar la economía para bajar la presión tributaria

El objetivo es bajar la presión tributaria ampliando la base de contribuyentes. Para eso, instrumentarán un nuevo índice de evasión y reorientarán la fiscalización de ingresos brutos.

Se está desarrollando una nueva metodología “para instrumentar un índice de evasión fehaciente”, que permitirá conocer el nivel de incumplimiento real en Ingresos Brutos en cada uno de los sectores de la economía.

Con la mirada puesta en la disminución de la presión tributaria, en la Provincia apuntan a formalizar la economía como “único camino posible” para lograr el objetivo.

El director de ARBA, Gastón Fossati, explicó que se está desarrollando una nueva metodología “para instrumentar un índice de evasión fehaciente”, que permitirá conocer el nivel de incumplimiento real en Ingresos Brutos en cada uno de los sectores de la economía.

El titular de la Agencia de Recaudación resaltó que, a partir de esos datos se podrán reorientar los controles sobre las actividades con mayor grado de informalidad, de manera de “combatir la evasión y ampliar la base de contribuyentes”.

Las autoridades del organismo bonaerense explicaron que se apuntará a optimizar los sistemas de recaudación, profundizar el proceso de modernización en las diferentes áreas y avanzar en mecanismos para alcanzar mayor equidad tributaria.

Durante la presentación del plan operativo del organismo, Fossati destacó que el objetivo para el 2017 es “recaudar $200.000 millones”, que es el monto de ingresos propios previsto en la pauta presupuestaria anual, y subrayó que, para homogeneizar y centralizar en un mismo sistema web la administración de todos los trámites y mejorar la calidad de respuesta, ARBA se encuentra implementando una plataforma única de atención al ciudadano contribuyente.

Desde el organismo destacaron también el desarrollo de la cuenta corriente integral de contribuyentes, que vinculará la información fiscal, facilitará su visualización y potenciará las gestiones por internet; la ampliación del sistema de fiscalización remota, con el que ya se controla de manera electrónica a los contribuyentes con inconsistencias; el monitoreo de comportamiento tributario, que sistematizará la detección de desvíos e irregularidades; la digitalización de trámites catastrales; la modernización documental del organismo y la mejora edilicia de los puntos de atención al público, entre otras iniciativas.

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