Consistente en su política de choque con la bajada de línea nacional, ahora decidió agregar treinta y cinco días no laborales, distribuidos en diferentes distritos, al calendario de la provincia de Buenos Aires.

Al comienzo del nuevo mandato presidencial, una de las primeras decisiones fue terminar con los fines de semana "XL", esos que unen dos feriados con el sábado y el domingo formando unas mini vacaciones. El gobierno los redujo a un tercio con el argumento de que interrumpían las clases y perjudicaban al comercio y la industria.

El decreto 52/2017, que llevó la firma del presidente Mauricio Macri, eliminó todos los puentes y dejó sólo uno de los tres "findes XL" que había antes: el de Carnaval. Esto marcó otra de sus idas y vueltas, cuando se intentó eliminar el carácter de “inamovible” al feriado del 24 de marzo, para luego dar marcha atrás con el decreto.

Pero según consta en la resolución número 17 del ministerio de Gobierno de la provincia de Buenos Aires, De la Torre ha decidido declarar no laborables -para la administración pública y el Banco de la Provincia de Buenos Aires, y feriados optativos para la industria, el comercio y restantes actividades- los días en los cuales se desarrollen festividades en los distintos partidos y localidades bonaerenses.

En la misma, se incluyen fechas no laborables para todas las localidades cuya fundación haya caído en el mes de marzo, lo cual implica algo más de treinta y cinco días en los que no habrá bancos, administración pública o comercios.

De este modo, se firma otra iniciativa política contradictoria en el esquema de Cambiemos, una alianza que elimina los feriados puente por considerar que afecta a la industria, pero agrega más de treinta y cinco días no laborables por mes.