17 conductores fueron detenidos por no cumplir con el decreto 840

17 conductores fueron detenidos por no cumplir con el decreto 840

Unas 17 personas resultaron detenidas por infracción al decreto 840, mientas que se retuvo 68 motocicletas por no contar con casco sus conductores y se hizo lo propio con 11 motos y 6 automóviles por contravención de alcoholemia, de acuerdo a lo informado por el director de la Agencia Provincial de Seguridad Vial Fernando Torres.

Los  operativos de seguridad vial y control de alcoholemia dispuestos por la Agencia Provincial de Seguridad Vial y la Policía de la Provincia de La Rioja, realizados en las últimas horas especialmente en horario nocturno, arrojó la detención de infractores al decreto 840 que prevé sanciones con multas y arresto a conductores que se desplazan violando las normativas vigentes.  De acuerdo al primer relevamiento, entre las 22 horas del viernes y las 7 de la mañana del sábado hubo 4  automóviles y 11 motos retenidas por alcoholemia positiva en conductores  y 35  motos retenidas por falta de casco. El dispositivo arrojó además 15 detenidos contravencionales por conducir en estado de ebriedad.  En tanto en la continuidad de los controles, entre las 7 de la mañana  y las 14 horas del sábado los números indicaron hubo 2 automóviles retenidos por alcoholemia positiva en conductores  y 33  motos retenidas por falta de casco. El dispositivo arrojó en esta franja horaria 2 detenidos contravencionales por conducir en estado de ebriedad.  Los operativos  se cumplieron en el marco de las políticas que se impulsan en la materia desde el Gobierno Provincial y que se canalizan a través del Ministerio de Gobierno, Seguridad y Derechos Humanos, participando efectivos de distintas áreas de la Policía Provincial y de todas las comisarías de la Capital.  Al igual que en otras oportunidades, el dispositivo para la prevención de accidentes viales se desplegó en las noche del viernes hasta la madrugada del sábado, para extenderse hasta pasado el mediodía, cubriendo especialmente zonas de boliches bailables y locales como bares con actividad nocturna, estableciéndose reductores de velocidades y control de alcoholemia sobre las avenidas principales de esta Capital.

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