El reglamento electoral del Frente Consenso Federal, el espacio que lidera Roberto Lavagna, establece las pautas que deberán seguir los dos sectores que se presentaron en La Plata para integrar, según el porcentaje que obtengan, la lista que competirá en las generales de octubre. 

Los sectores que competirán son el liderado por Gabriel Crespi como precandidato a intendente, Luciano Sanguinetti como primer concejal y Lorena Pagano como senadora y el de Carlos Ortelli, Mauro Coronel y Agustín Schmidt respectivamente. 

Ese reglamento fija cuál es el piso de votos positivos que se debe tener la minoría para integrar la lista definitiva, como así también el casillero a partir del cual se habilita esa integración. En este caso, el criterio que se usará para los legisladores provinciales es distinto al de los concejales.

Para los lugares en la Legislatura, la línea interna que salga segunda podrá integrarse en el cuarto puesto de la lista que competirá en octubre si alcanza al menos el 25% de los votos positivos del frente. En el caso platense esa opción es prácticamente excluyente de la segunda fuerza ya que las bancas de senadores son sólo tres, por lo que la minoría ocuparía el lugar del primer suplente. No exitste -al menos explícitamente- una interpretación diferente y especial para los casos en los que la cantidad de puestos en juego sean menos que el casillero previsto para el perdedor.

Para la categoría municipal, la integración de la lista final para el Concejo Deliberante será determinada aplicando el sistema D' Hont entre todas las listas de la alianza que hubieren obtenido, como mínimo, el 15% de los votos positivos.

A diferencia del caso anterior, la integración de la minoría no comenzará a partir de un casillero determinado, sino que el ordenamiento surgirá del cálculo que establece ese sistema, que consiste en dividir el número de votos obtenidos por cada lista por 1, 2, 3 y hasta igual número a la cantidad de cargos a elegir. En el caso platense se divide hasta 12.

EJEMPLOS

-En el hipotético caso en el que el resultado sea de 70 a 30 por ciento entre las dos fuerzas que compiten en La Plata, la fuerza ganadora incluiría a 9 de los 12 precandidatos ocupando los dos primeros lugares de la lista. Recién el 3º, 6º y 9º serían para la minoría.

-En un escenario de mayor paridad, con un resultado 60 a 40, el reparto sería 7 a 5 y la fuerza perdedora podría intercalar al segundo lugar de la lista, con presencia en el 4º, 7º, 9º y 12º.

-Especulando con el escenario de disparidad más extrema, en el que quien sale segundo apenas llega al 15% requerido como piso y el ganador al 85%, el reparto dejaría al perdedor con un sólo representante en el sexto lugar de la lista.

En ningún caso se contempla la paridad obligatoria, la cual se podría ver afectada al intercalarse las listas. Se infiere que el cierre definitivo deberá ser producto de un acuerdo de ambos sectores. Como en el caso platense los primeros precandidatos a concejales de ambas listas son varones, el primer escenario es el que facilitaría la intercalación respetando la paridad.